17 Febrero 2013
EN LAS VÍAS. Al sudeste de la capital está el barrio Ampliación Miguel Lillo.
La zona de Los Chañaritos pertenece, desde el año pasado, a la jurisdicción de capital. Sin embargo, sus habitantes sostienen que tienen muchos problemas de jurisdicción.
Anteriormente esta localidad figuraba como parte de la comuna de El Manantial. Por eso los servicios y la respuesta en seguridad estaban a cargo de esa comuna. Pero ahora, los vecinos no saben adónde recurrir cuando tienen un problema.
"Lo más grave que tenemos en este lugar es que entre la seccional 9° y la 13° se tiran la pelotita y ni una ni la otra nos reciben las denuncias. Esta es una zona peligrosa, donde ocurren muchos robos. Cuando se hace de noche ni siquiera los taxis quieren entrar a este lugar", aseveró Mabel Gerez, una mujer que vive el barrio Ampliación Miguel Lillo.
La Línea 141 es la única empresa del transporte público de pasajeros que circula por este lugar y los vecinos afirman que el último servicio pasa alrededor de las 22.30 por el barrio.
Al lado del Ampliación Miguel Lillo está el barrio Policial IV. Hace dos semanas, un grupo de unas 160 familias que viven a metros de las vías del tren intentaron ocupar tres manzanas que están destinadas a la construcción de las plazas del barrio Policial IV. "La gente que se quiso meter vive en casas donde conviven hasta tres familias juntas. Esos terrenos están descuidados y el pasto está muy alto. Acá hay muchos niños y ese lugar es un peligro porque los delincuentes lo usan para esconderse", señaló Miguel Ángel Díaz. Juan Carlos Cruz afirmó que él fue una de las personas que intentó tomar las tierras del Policial IV. "Hace tiempo que corre el rumor de que nos van a sacar del lado de las vías, porque son tierras que le pertenecen al ferrocarril. Fue por eso que intentamos tomar esas tierras", se excusó Cruz. A su vez, Analía Soledad Peralta, una mujer que también reconoció haber participado del intento de usurpación, señaló que avanzaron sobre esos terrenos porque están abandonados. Según señalaron, mantuvieron una reunión con autoridades del Instituto Provincial de Vivienda y Desarrollo Urbano para tratar de llegar a un acuerdo, pero no dieron más datos acerca de la supuesta negociación. Esa repartición del Gobierno se ocupó de la construcción del barrio Policial IV.
Por otra parte, Roxana Gramajo se quejó por el funcionamiento del Centro de Integración Comunitaria (CIC) de Los Chañaritos. "Dan muy pocos números y sólo hay un pediatra y un médico generalista; dan 10 turnos cada uno. Con la cantidad de personas que van al CIC, esos turnos nunca alcanzan para que nos atiendan a todos", analizó.
Anteriormente esta localidad figuraba como parte de la comuna de El Manantial. Por eso los servicios y la respuesta en seguridad estaban a cargo de esa comuna. Pero ahora, los vecinos no saben adónde recurrir cuando tienen un problema.
"Lo más grave que tenemos en este lugar es que entre la seccional 9° y la 13° se tiran la pelotita y ni una ni la otra nos reciben las denuncias. Esta es una zona peligrosa, donde ocurren muchos robos. Cuando se hace de noche ni siquiera los taxis quieren entrar a este lugar", aseveró Mabel Gerez, una mujer que vive el barrio Ampliación Miguel Lillo.
La Línea 141 es la única empresa del transporte público de pasajeros que circula por este lugar y los vecinos afirman que el último servicio pasa alrededor de las 22.30 por el barrio.
Al lado del Ampliación Miguel Lillo está el barrio Policial IV. Hace dos semanas, un grupo de unas 160 familias que viven a metros de las vías del tren intentaron ocupar tres manzanas que están destinadas a la construcción de las plazas del barrio Policial IV. "La gente que se quiso meter vive en casas donde conviven hasta tres familias juntas. Esos terrenos están descuidados y el pasto está muy alto. Acá hay muchos niños y ese lugar es un peligro porque los delincuentes lo usan para esconderse", señaló Miguel Ángel Díaz. Juan Carlos Cruz afirmó que él fue una de las personas que intentó tomar las tierras del Policial IV. "Hace tiempo que corre el rumor de que nos van a sacar del lado de las vías, porque son tierras que le pertenecen al ferrocarril. Fue por eso que intentamos tomar esas tierras", se excusó Cruz. A su vez, Analía Soledad Peralta, una mujer que también reconoció haber participado del intento de usurpación, señaló que avanzaron sobre esos terrenos porque están abandonados. Según señalaron, mantuvieron una reunión con autoridades del Instituto Provincial de Vivienda y Desarrollo Urbano para tratar de llegar a un acuerdo, pero no dieron más datos acerca de la supuesta negociación. Esa repartición del Gobierno se ocupó de la construcción del barrio Policial IV.
Por otra parte, Roxana Gramajo se quejó por el funcionamiento del Centro de Integración Comunitaria (CIC) de Los Chañaritos. "Dan muy pocos números y sólo hay un pediatra y un médico generalista; dan 10 turnos cada uno. Con la cantidad de personas que van al CIC, esos turnos nunca alcanzan para que nos atiendan a todos", analizó.
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