El catolicismo crece en Latinoamérica, Asia y África; en Europa hay crisis de vocaciones

SAN PABLO.- El cardenal Joao Braz de Aviz, el religioso brasileño que tiene más posibilidades de ser el sucesor de Benedicto XVI según los analistas vaticanos, admitió que "la base de la Iglesia" se trasladó a América Latina, Asia y África, mientras que en Europa "sólo quedaron los monumentos históricos". En una entrevista al diario O Estado de Sao Paulo, admitió que existe una "preocupante" pérdida de fieles y de vocación en el viejo continente.

El arzobispo emérito de Brasilia, de 65 años, aclaró que eso no significa necesariamente que el sucesor del Papa renunciante provenga de algún país en desarrollo. Braz es actualmente prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica del Vaticano, por lo cual integra el círculo más cercano de colaboradores del pontífice.

"Hay un traslado de la presencia de la Iglesia en el mundo, como respuesta a evolución de las poblaciones. En especial, en África y en Latinoamérica, donde hay un sentido de religiosidad muy fuerte, y en Asia, donde está despuntando. Son fenómenos reales que la Iglesia considera como importantes", afirmó el prelado, quien adhiere a una Teología de la Liberación "moderada".

En su opinión, la posibilidad de que el próximo Papa sea de Sudamérica "existe", aunque aclara que en la Iglesia "las cosas no suceden de repente". "Hay un celo muy grande. Dentro del cónclave, es la calidad personal de cada uno lo que pesa. A veces se puede llegar a la conclusión de que aún no es el momento" de que se elija un Papa de esta región.

Sobre la renuncia de Benedicto XVI, el religioso brasileño consideró que fue "un gesto con el que mostró una gran fidelidad a la Iglesia", y con el que "dejó en claro que no quiere molestar". "Seguramente consideró que Juan Pablo II ya había vivido la exposición pública del deterioro de su salud y que no quería pasar por lo mismo", agregó. Entre las razones de la abdicación, no descartó la mella que le pudo haber causado al pontífice el escándalo por el robo de documentos internos por su mayordomo, Paolo Gabriele. "Sufrió mucho con eso, y le creó vulnerabilidad. Es natural que él esté preocupado con el hecho de que esa situación lo haya deteriorado", indicó.

El cónclave secreto de cardenales para elegir al nuevo Papa comenzará después del 15 de marzo, según confirmó ayer el vocero de la Santa Sede, padre Federico Lombardi, quien pidió a los católicos que no se sientan desorientados por la decisión de Benedicto XVI. Las normas vaticanas fijan el inicio de la deliberación entre 15 y 20 días luego de que el Obispado de Roma quede vacante. (DPA-Reuters)