09 Febrero 2013
Finalmente, la joven Nancy Robles, parecida a Marita Verón, llegó ayer, a las 19.30, a Tucumán. La chica y su madre, María Robles, padecieron una larga espera por trámites judiciales y trabas burocráticas que le interpusieron en el juzgado de la II° Nominación del Centro Judicial Metán, en Salta.
En principio estaba previsto que la madre de la paciente asistiera a una audiencia a las 9.30 de ayer en la ciudad de Rosario de la Frontera; mientras su hija seguía internada en la sala de terapia del hospital. Pero las idas y vueltas fueron postergando la reunión hasta el mediodía. La forma en la que se manejó el juez salteño Carlo Graciano provocó la reacción del abogado Carlos Garmendia, representante de la fundación María de los Ángeles. "Aquí no hay duda de la incompetencia y de la falta de humanidad del juez Graciano. Esto podría haberse solucionado la noche en que llegamos a Rosario de la Frontera y nos volvíamos todos juntos sin más demoras, pero evidentemente el juez no quiere trabajar fuera del horario matutino", afirmó.
Además de las demoras judiciales en Salta, las autoridades de la comisaría dudaban respecto del móvil en el que debía ser trasladada la joven paciente (sufre de esquizofrenia). La policía salteña advirtió sobre el impedimento de la ambulancia de esa provincia para traspasar la frontera de Tucumán por razones de jurisdicción.
La madre de Nancy se había visto obligada a hacer noche en Rosario de la Frontera a la espera de que el juez Graciano autorizara que le tomaran declaración en la comisaría de esa ciudad. Preocupada por las demoras, la mujer consultó si debía quedarse más tiempo en la ciudad salteña para organizar su periplo. Desde la Fundación que preside Susana Trimarco siguieron de cerca los trámites que debía realizar María Robles para reencontrarse con su hija.
"El resultado de todo esto fue que esta mujer ha sido maltratada por el juez, porque la tuvieron de un lado a otro y le cambiaron el oficio y demás", remarcó Garmendia.
La joven regresó a Tucumán, pero seguirá internada por disposición del juez Graciano. En esta provincia fue alojada en dependencias del hospital Nuestra Señora del Carmen.
Garmendia resaltó que la chica y su madre recibirá una asistencia de la fundación que preside Trimarco. "Ellas no tienen ni siquiera obra social y eso se debe resolver cuanto antes", dijo.
La joven había sido encontrada por vecinos en la zona de El Cruce (Salta) el 21 de enero pasado. Deambulaba sin rumbo. La Policía la llevó al hospital, donde creyeron que podía tratarse de Marita Verón. Después de un gran revuelo, esa hipótesis se descartó el jueves y se pidió el traslado a Tucumán.
En principio estaba previsto que la madre de la paciente asistiera a una audiencia a las 9.30 de ayer en la ciudad de Rosario de la Frontera; mientras su hija seguía internada en la sala de terapia del hospital. Pero las idas y vueltas fueron postergando la reunión hasta el mediodía. La forma en la que se manejó el juez salteño Carlo Graciano provocó la reacción del abogado Carlos Garmendia, representante de la fundación María de los Ángeles. "Aquí no hay duda de la incompetencia y de la falta de humanidad del juez Graciano. Esto podría haberse solucionado la noche en que llegamos a Rosario de la Frontera y nos volvíamos todos juntos sin más demoras, pero evidentemente el juez no quiere trabajar fuera del horario matutino", afirmó.
Además de las demoras judiciales en Salta, las autoridades de la comisaría dudaban respecto del móvil en el que debía ser trasladada la joven paciente (sufre de esquizofrenia). La policía salteña advirtió sobre el impedimento de la ambulancia de esa provincia para traspasar la frontera de Tucumán por razones de jurisdicción.
La madre de Nancy se había visto obligada a hacer noche en Rosario de la Frontera a la espera de que el juez Graciano autorizara que le tomaran declaración en la comisaría de esa ciudad. Preocupada por las demoras, la mujer consultó si debía quedarse más tiempo en la ciudad salteña para organizar su periplo. Desde la Fundación que preside Susana Trimarco siguieron de cerca los trámites que debía realizar María Robles para reencontrarse con su hija.
"El resultado de todo esto fue que esta mujer ha sido maltratada por el juez, porque la tuvieron de un lado a otro y le cambiaron el oficio y demás", remarcó Garmendia.
La joven regresó a Tucumán, pero seguirá internada por disposición del juez Graciano. En esta provincia fue alojada en dependencias del hospital Nuestra Señora del Carmen.
Garmendia resaltó que la chica y su madre recibirá una asistencia de la fundación que preside Trimarco. "Ellas no tienen ni siquiera obra social y eso se debe resolver cuanto antes", dijo.
La joven había sido encontrada por vecinos en la zona de El Cruce (Salta) el 21 de enero pasado. Deambulaba sin rumbo. La Policía la llevó al hospital, donde creyeron que podía tratarse de Marita Verón. Después de un gran revuelo, esa hipótesis se descartó el jueves y se pidió el traslado a Tucumán.