De paladar "xeneize"

MENDOZA.- Encontrar jugadas de peligro en esta revancha de superclásico de miércoles por la noche puede ser tan difícil como hallar agua en el desierto. Ninguno de los dos mostró ser superior, aunque por mérito, puede decirse que River propuso más que Boca, pero que Boca tuvo la chance más clara y después se hizo fuerte en los penales, gracias a los reflejos de Oscar Ustari.

River tuvo la única suya (porque alcanzó a definir al menos) en los pies de Funes Mori, antes del minuto de juego. ¿Qué pasó? Nada. El mellizo se apuró al definir con un remate rasante y cruzado que corrió a la línea de los suspiros. Casi. Casi nada. En Boca la situación pasó de mala a peor que mala. Volvió a fallar en el medio, aunque con otro equipo, éste lleno de pibes y futbolistas que no están entre los planes de Carlos Bianchi.

Los chicos, igualmente, casi se topan con el 1-0 a los 78'. Centro pasado que Fernández no logra acomodar; guantazo de Barovero y toque colgado de Erbes para superar al uno "millonario". Vangioni salvó las papas en la línea. Y ya sobre el cierre, primero Sánchez y después Manuel Lanzini se animaron a probar desde lejos. Tampoco pasó nada.

Entonces, como la cosa seguía fea, el partido y la revancha de lo que había sido el 2-0 de los de Núñez en Mar del Plata pasó a dirimirse desde los 11 metros. Y por esa vía ganó el que supo acertar y adivinar la intención del rival. Fue Ustari el que terminó siendo la figura y dándole a Boca la victoria por 5 a 4. "Oski" atajó dos, Barovero uno y ahí estuvo la diferencia.  Boca levantó justo la copa donde River siempre es profeta. (Especial)