29 Enero 2013
BUENOS AIRES.- La presidenta, Cristina Fernández, aseguró que está "desprovista de ambiciones", porque tiene mucho más de lo que podría aspirar, y pidió ayuda a las jerarquías de todos los poderes para que el país siga adelante. En un discurso de 52 minutos, la jefa el Estado apeló al corazón de los argentinos para pedir "con la fuerza de siempre" que la ayuden a continuar con el modelo. "Estoy desprovista de ambiciones, tengo mucho más de lo que podría aspirar, llegué a donde nunca pensé que iba a llegar", advirtió en la Casa Rosada, y agregó: "tengo todo y por eso les pido que me ayuden para que el país siga adelante". En este marco, advirtió que "la Argentina no empezó cuando yo llegué ni se va a terminar cuando yo me vaya". Finalizado el acto, la Presidenta se asomó al balcón de uno de los patios interiores de la Rosada, donde la esperaba una gran cantidad de militantes que habían sido convocados para la ocasión. (DyN)