23 Enero 2013
BUENOS AIRES.- Las fracciones oficialista y opositora de la CGT y el sector de la CTA liderado por Hugo Yasky dejaron ayer de lado sus diferencias para unificar el discurso en el reclamo de una suba del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias, convencidos de que su falta de actualización licuaría los incrementos salariales que pudieran obtenerse en las negociaciones paritarias.
El líder del gremio de los taxistas y dirigente de la CGT oficialista, Omar Viviani, propuso un mínimo no imponible "a partir de los $ 20.000", lo que implica un ajuste de más del 100% respecto de los actuales niveles, vigentes desde abril de 2011, en tanto Yasky consideró que el tema debe ser abordado a través de una ley, "para evitar que todos los años estemos parados en el mismo lugar, discutiendo si se eleva o no, o cuánto se eleva".
A su vez, el jefe de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), Gerónimo Venegas, advirtió que "con cuatro paros, el Gobierno pierde todo lo que recauda con el actual mínimo no imponible" y el secretario general del gremio de los Judiciales, Julio Piumato, dijo que "la actualización del impuesto a las Ganancias deberá ser significativa". También destacó que con la CGT opositora van a tomar como referencia "la inflación del supermercado", pero teniendo en cuenta "la realidad de cada actividad", y sostuvo que, a partir de esas dos variables, van definir los números de las paritarias.
Por su parte, Venegas aseguró que "hoy no podemos discutir nada con el Gobierno porque no nos atiende. El Gobierno nos ha dejado helados para negociar con la 'CGT Caló' (por la central obrera oficialista), pero lo que pasa es que la 'CGT Caló' tampoco puede negociar si realmente no se levanta el mínimo no imponible, que se le está quedando a los trabajadores con las horas extras".
En cuanto a Viviani, sostuvo que "lo que mide el Indec puede ser un dibujo" y destacó que "hay una inflación que está entre el 20 y el 22%". El sindicalista no confirmó el porcentaje de aumento salarial que pedirá su gremio, pero deslizó que estará en torno al 25% "como en otros años", y aseguró que "ningún funcionario" le dijo "cuál tiene que ser el techo de la negociación".(DyN)
El líder del gremio de los taxistas y dirigente de la CGT oficialista, Omar Viviani, propuso un mínimo no imponible "a partir de los $ 20.000", lo que implica un ajuste de más del 100% respecto de los actuales niveles, vigentes desde abril de 2011, en tanto Yasky consideró que el tema debe ser abordado a través de una ley, "para evitar que todos los años estemos parados en el mismo lugar, discutiendo si se eleva o no, o cuánto se eleva".
A su vez, el jefe de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), Gerónimo Venegas, advirtió que "con cuatro paros, el Gobierno pierde todo lo que recauda con el actual mínimo no imponible" y el secretario general del gremio de los Judiciales, Julio Piumato, dijo que "la actualización del impuesto a las Ganancias deberá ser significativa". También destacó que con la CGT opositora van a tomar como referencia "la inflación del supermercado", pero teniendo en cuenta "la realidad de cada actividad", y sostuvo que, a partir de esas dos variables, van definir los números de las paritarias.
Por su parte, Venegas aseguró que "hoy no podemos discutir nada con el Gobierno porque no nos atiende. El Gobierno nos ha dejado helados para negociar con la 'CGT Caló' (por la central obrera oficialista), pero lo que pasa es que la 'CGT Caló' tampoco puede negociar si realmente no se levanta el mínimo no imponible, que se le está quedando a los trabajadores con las horas extras".
En cuanto a Viviani, sostuvo que "lo que mide el Indec puede ser un dibujo" y destacó que "hay una inflación que está entre el 20 y el 22%". El sindicalista no confirmó el porcentaje de aumento salarial que pedirá su gremio, pero deslizó que estará en torno al 25% "como en otros años", y aseguró que "ningún funcionario" le dijo "cuál tiene que ser el techo de la negociación".(DyN)
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