Sin delegación oficial, ellos viajan por su cuenta a Cosquín

El sueño comenzará a hacerse realidad mañana, cuando trepen al ómnibus que los llevará rumbo a la "meca del folclore", como varios coinciden en llamarla. Se van a Cosquín, una vez más, con las guitarras cargadas de esperanzas y apelando a que el gran jurado, el aplauso, sea el ticket que les asegure una nueva presentación durante las próximas ediciones. Este año no habrá una delegación oficial tucumana en el escenario más grande del folclore argentino. La carroza que se paseó el año pasado por la plaza Próspero Molina volvió a convertirse en calabaza y el escenario Atahualpa Yupanqui se quedará sin un equipo que represente a nuestra provincia. A pocos le sorprende: eso mismo ocurrió los 30 años anteriores a 2012.

Sin embargo, que no haya una delegación oficial no quiere decir que el festival de Cosquín no cuente con la presencia de nuestros artistas. Algunos de ellos, como Las voces del boquerón, ya se midieron en el escenario más codiciado del circuito folclórico, y otros lo harán durante las seis lunas que aún restan para que termine el encuentro.

Como desde hace varios años, el grupo Tucumanos rumbo a Cosquín volvió a abrir el juego y convocó a todos los artistas que quieran presentarse para aunar fuerzas, recursos y empuje. Al principio acudieron a las reuniones más de 60 músicos, y llegaron a buen puerto poco más de 35. Ellos recibieron un subsidio del Ente Cultural por $20.000, con lo que pudieron costear el micro para trasladarse a Córdoba.

Algunos se presentarán en el escenario mayor, donde podrán mostrar lo que hacen en diez minutos, pero ante una audiencia televisiva incalculable. Ese es el trofeo más grande que pueden llevarse, según admitieron en una entrevista con LA GACETA. "La magia de Cosquín está en todos lados, no solo en el escenario Atahualpa Yupanqui. Está en las peñas y en los espectáculos callejeros, en los que cuenta 'el aplausómetro' más que cualquier otra valoración", explica Fabio Dip, integrante de Los Arrieros y uno de los organizadores del viaje. Completan la comitiva músicos de Los Yampas, Los Grillos Tucumanos, Los Duendes Copleros y los solistas Pablo Garnica, Romina Barros y Nancy Soria, entre otros.

Los más ilusionados son los integrantes de Los Arrieros, quienes por cuarta vez estarán en el escenario mayor y por segunda vez consecutiva saldrán por televisión a todo el país. "El año pasado, de las tres canciones que podíamos tocar, hicimos solo dos porque se atrasaron los otros músicos y los ajustes se hacen para atrás. Esperemos que esta sea la revancha", remarcó Dip. Los Arrieros, formado además por Mariano Díaz Briz, Martín Salvadeo y Ezequiel Rodríguez, se presentará el domingo 27, durante la noche de cierre del festival.

No cerraron los números
"La actuación de la delegación oficial de Tucumán, el año pasado, nos dejó muy bien parados. Tanto que al resto de los músicos que fuimos, por el solo hecho de ser tucumanos, se nos abrieron un montón de puertas. Es una pena que este año no estemos presentes", se lamentó Pablo Artaza, de Los Yampas.

La ausencia tiene una explicación y pocas vueltas que darle: la plata. "Este año los costos han subido muchísimo y la situación económica no nos permite hacer semejante erogación. Por eso optamos por apoyar a los músicos que lo solicitaron, pero no mandar una comitiva oficial", explicó Mauricio Guzman, presidente del Ente de Cultura. Según el funcionario, el precio de los 15 minutos de show en el escenario mayor, para las comitivas oficiales, es de $ 90.000, lo que incluye además stands en la feria de artesanos. "A eso hay que sumarle el traslado, el vestuario y el alojamiento de la delegación, lo que hace que la suma ascienda a unos $ 250.000. No estamos en condiciones de hacer ese gasto", insistió Guzman.

Es así que los tucumanos tendrán que conformarse con las peñas y los espectáculos callejeros, escenarios nada despreciables dentro de la meca del folclore. Aprovecharán la oportunidad para hacer conferencias de prensa y repartir material para difusión entre los medios de todo el país y para seguir alimentando el sueño de llegar al escenario mayor.