08 Enero 2013
La búsqueda de nuevas empleadas en un comercio del rubro marroquinería evidenció una vez más la carencia de empleo, y uno estable, para los jóvenes tucumanos.
Una larga fila de mujeres se formó ayer en la peatonal Mendoza, altura al 600. La hilera, de casi 50 metros, reflejó el interés de decenas de chicas por cubrir los 10 puestos de trabajo que ofreció una conocida firma de marroquinería. La empresa tiene previsto incorporar nuevas agentes de venta durante el período comercial previo al inicio de las clases.
Cristina Quiroga, de 24 años, fue una de las jóvenes que presentaron sus Curriculum Vitae (hoja de vida) en el negocio. "Antes trabajaba en un drugstore y ahora cuido niños. Pero busco un buen empleo, que sea en 'blanco'", comentó.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en la provincia hay 23.000 desocupados. La franja juvenil, en particular las mujeres hasta 29 años, es la más afectada, con un 11,6%, lo que representa casi tres veces la tasa general de desempleo en el Gran San Miguel de Tucumán-Tafi Viejo.
"Conseguir trabajo es muy difícil. Y lo que se ofrece, muchas veces, no es lo que se espera. Hoy todos nos conformamos con poco, por inexperiencia o por necesidad", dijo Ana Figueroa, de 21 años, que reside en el barrio Sur de esta ciudad.
La joven remarcó que cada vez es más difícil hallar un empleo estable y una remuneración acorde a la actividad y a la capacitación de la persona.
"Cuando uno se capacita es más difícil obtener un puesto en los negocios comerciales. En mi caso, soy auxiliar contable y me cuesta incorporarme al mercado laboral", afirmó la joven.
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