29 Diciembre 2012
ALEPO.- El líder de la oposición siria, Moaz Alkhatib, rechazó una invitación de Rusia para participar en negociaciones de paz con el Gobierno de Bashar al Assad, asestando un nuevo golpe a las esperanzas internacionales de poder resucitar la vía diplomática y poner fin a 21 meses de guerra civil.
Alkhatib encabeza la Coalición Nacional, que reúne a los rivales del Presidente sirio, y que fue reconocida por la mayoría de los países occidentales y árabes. El dirigente reclamó una disculpa de parte de Rusia por su apoyo al régimen. "Podríamos reunirnos en un país árabe si hubiese una agenda clara. Es clave que Al Assad dimita", dijo.
Rusia aclaró que respalda los esfuerzos del mediador de la ONU y de la Liga Árabe en ese conflicto, Lakhdar Brahimi, quien llegará hoy a Moscú para reflotar un plan de paz que contempla crear un Gobierno de transición. Al diplomático se le cuestiona que no especificó si Al Assad debería permanecer en el cargo hasta el fin de su mandato presidencial, en 2014.
Los insurgentes avanzan firmemente sobre el terreno, con importantes victorias militares que le permiten el control de terrenos cada vez más grandes. Ahora creen que pueden derrocar al régimen, lo que los lleva a asumir posiciones más dogmáticas. "No estamos de acuerdo con nada de lo que dice Brahimi", afirmó el coronel opositor Abdel Jabbar Oqaidi. Para contener los ataques, la Fuerza Aérea bombardeó suburbios de Damasco y de otras ciudades, y destruyó un campamento de militantes de Al Qaeda cerca de la frontera con Irak. (Reuters-DPS-Télam)
Alkhatib encabeza la Coalición Nacional, que reúne a los rivales del Presidente sirio, y que fue reconocida por la mayoría de los países occidentales y árabes. El dirigente reclamó una disculpa de parte de Rusia por su apoyo al régimen. "Podríamos reunirnos en un país árabe si hubiese una agenda clara. Es clave que Al Assad dimita", dijo.
Rusia aclaró que respalda los esfuerzos del mediador de la ONU y de la Liga Árabe en ese conflicto, Lakhdar Brahimi, quien llegará hoy a Moscú para reflotar un plan de paz que contempla crear un Gobierno de transición. Al diplomático se le cuestiona que no especificó si Al Assad debería permanecer en el cargo hasta el fin de su mandato presidencial, en 2014.
Los insurgentes avanzan firmemente sobre el terreno, con importantes victorias militares que le permiten el control de terrenos cada vez más grandes. Ahora creen que pueden derrocar al régimen, lo que los lleva a asumir posiciones más dogmáticas. "No estamos de acuerdo con nada de lo que dice Brahimi", afirmó el coronel opositor Abdel Jabbar Oqaidi. Para contener los ataques, la Fuerza Aérea bombardeó suburbios de Damasco y de otras ciudades, y destruyó un campamento de militantes de Al Qaeda cerca de la frontera con Irak. (Reuters-DPS-Télam)
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