Vélez es otra vez campeón

Vélez es otra vez campeón

Con goles de Ferreyra el "fortín" venció 2-0 a Unión, y la derrota de Lanús ante River los consagró como los mejores del campeonato.

DETERMINANTE. Con sus goles, Ferreyra catapultó a Vélez a lo más alto de la tabla. DYN DETERMINANTE. Con sus goles, Ferreyra catapultó a Vélez a lo más alto de la tabla. DYN
02 Diciembre 2012

BUENOS AIRES.- Costó pero al fin hubo fiesta esta tarde en Liniers, y encima anticipada, por el noveno título de Vélez en el fútbol argentino al consagrarse campeón del torneo Inicial al vencer a Unión 2-0.

La victoria construida con dos goles de Facundo Ferreyra, el joven que descendió con Banfield hace seis meses y hoy es el goleador del campeón, le dio enjundia para salir a festejar y dar la vuelta Olímpica casi cinco minutos antes de que se cierre el triunfo de River sobre Lanús, el único que podía extenderle la ansiedad una semana más.

Con la moderación que siempre lo caracterizo, el técnico Ricardo Gareca escuchó el final del partido del Monumental junto a los periodistas dentro del campo y fue cortés al responder preguntas sobre su continuidad pese a que aún mantuvo el enigma. Luego del pitazo, levanto los brazos y fue a buscar uno a uno a sus dirigido para darles un abrazo y un casi paternal abrazo.

Había pasado un primer tiempo incómodo sin desplegar las razones futbolísticas por las que llegó a la penúltima fecha como amplias chances de título.

Solo algunos intentos aislados en los primeros minutos lograron inquietar a Perafán, arquero de Unión, con un desborde de Bella que conectó Ferreyra y luego cuando Tobio y el "Chucky" se lo perdieron en una jugada confusa.

Tan a contramano venía el partido para Vélez que a los 32 Tobio intentó despejar dentro del área, la pelota rebotó en Monteros y le quedó a Alejandro Pérez, quien remató cruzado y la pelota se fue acariciando el palo derecho de Sosa.

Vélez cambió en el segundo, se reencontró con sus mejores atributos y empezó a mostrarse como campeón. Y así y todo sufrió sofocones.

Faltaban once minutos en Liniers para el final de ese partido cuando explotó el Amalfitani con el gol del uruguayo Mora en el Monumental y ahí se largó la fiesta.

Encima, rápido Ferreyra definió a la derecha de Perafán para el segundo tras la habilitación de Lucas Pratto, como sellando ambos la sociedad joven que sin antecedentes en el club de repente se convirtió en la delantera campeona. (DyN)

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