28 Noviembre 2012
BUENOS AIRES.- Sesenta y ocho acusados de haber cometido 798 secuestros, torturas y homicidios en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) comenzaron a ser juzgados esta mañana en el tercer juicio por los crímenes de lesa humanidad cometidos en ese centro clandestino durante la última dictadura, el mayor de todos los realizados hasta ahora.
En este juicio, el tercero por crímenes cometidos en la ESMA, se procesará a los pilotos de los "vuelos de la muerte", durante la última dictadura militar (1976-1983). En los "vuelos de la muerte" se arrojaba a detenidos desaparecidos de la dictadura vivos desde aviones militares al Río de la Plata y el océano Atlántico, revelaron sobrevivientes de la ESMA y el ex represor y capitán de corbeta Adolfo Scilingo.
Scilingo confesó ante la justicia española haber tirado a 30 secuestrados que estaban anestesiados y hoy cumple una condena en el país europeo.
También se juzgará a los pilotos de Aerolíneas Argentinas y prefectos retirados Enrique José De Saint y Georges Mario Daniel Arru, a Alejandro Domingo D'Agostino, jefe de la División de Veteranos de Guerra de la Prefectura Naval, a los ex marinos Alfredo Astiz, Eduardo "El Tigre" Acosta, a los aviadores navales Julio Poch y Emir Sisul Hess, y a civiles como el ex secretario de Hacienda Juan Alemann y el abogado Gonzalo Torres de Tolosa, que supuestamente se hacía llamar "teniente Vaca" y habría participado de los "vuelos de la muerte"-
La gran cantidad de imputados ocupó la casi totalidad de la planta baja de la Sala Amia, del Tribunal Oral en lo Criminal Federal 5 (TOF5), hasta detrás de los blindex donde habitualmente se ubica el público, en tanto los familiares de las víctimas ocuparon la bandeja superior, separados del grupo de familiares de los represores, encabezados por Cecilia Pando.
Los periodistas no pudieron ingresar a la sala, a excepción de medio centenar de reporteros gráficos que tuvieron 15 minutos para tomar fotos de los acusados, antes de que el Tribunal Oral Federal 5 comenzara a leer el requerimiento de elevación a juicio.
La ESMA fue el principal centro de detención clandestino de la dictadura, y por el que se estima que pasaron unos 5.000 detenidos ilegales
Se investigarán 789 crímenes de lesa humanidad y se presentarán unos 900 testigos. La mayoría de los imputados que estarán en el banquillo fueron oficiales y suboficiales de la Armada, algunos de los cuales ya recibieron condenas en el juicio "ESMA II". El "ESMA I" tuvo un solo acusado, el ex prefecto Héctor Febres, quien se suicidó en 2007 ingiriendo cianuro en vísperas del veredicto.
La apertura del juicio fue transmitida en simultáneo en un auditorio del Instituto Espacio para la Memoria creado en la ex ESMA.
El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) identificó en 2005 varios cadáveres aparecidos en la costa atlántica argentina en 1977 y certificó que presentaban fracturas posiblemente causadas por la caída desde gran altura y el impacto con el agua.
Entre las víctimas de los "vuelos de la muerte" identificadas estaban la fundadora de las Madres de Plaza de Mayo -que buscan a sus hijos desaparecidos durante la dictadura-, Azucena Villaflor de Devicenti, y la monja fracesa Leonie Duquet, que habían sido secuestradas por grupos de tareas de la ESMA. (DPA-Télam)
En este juicio, el tercero por crímenes cometidos en la ESMA, se procesará a los pilotos de los "vuelos de la muerte", durante la última dictadura militar (1976-1983). En los "vuelos de la muerte" se arrojaba a detenidos desaparecidos de la dictadura vivos desde aviones militares al Río de la Plata y el océano Atlántico, revelaron sobrevivientes de la ESMA y el ex represor y capitán de corbeta Adolfo Scilingo.
Scilingo confesó ante la justicia española haber tirado a 30 secuestrados que estaban anestesiados y hoy cumple una condena en el país europeo.
También se juzgará a los pilotos de Aerolíneas Argentinas y prefectos retirados Enrique José De Saint y Georges Mario Daniel Arru, a Alejandro Domingo D'Agostino, jefe de la División de Veteranos de Guerra de la Prefectura Naval, a los ex marinos Alfredo Astiz, Eduardo "El Tigre" Acosta, a los aviadores navales Julio Poch y Emir Sisul Hess, y a civiles como el ex secretario de Hacienda Juan Alemann y el abogado Gonzalo Torres de Tolosa, que supuestamente se hacía llamar "teniente Vaca" y habría participado de los "vuelos de la muerte"-
La gran cantidad de imputados ocupó la casi totalidad de la planta baja de la Sala Amia, del Tribunal Oral en lo Criminal Federal 5 (TOF5), hasta detrás de los blindex donde habitualmente se ubica el público, en tanto los familiares de las víctimas ocuparon la bandeja superior, separados del grupo de familiares de los represores, encabezados por Cecilia Pando.
Los periodistas no pudieron ingresar a la sala, a excepción de medio centenar de reporteros gráficos que tuvieron 15 minutos para tomar fotos de los acusados, antes de que el Tribunal Oral Federal 5 comenzara a leer el requerimiento de elevación a juicio.
La ESMA fue el principal centro de detención clandestino de la dictadura, y por el que se estima que pasaron unos 5.000 detenidos ilegales
Se investigarán 789 crímenes de lesa humanidad y se presentarán unos 900 testigos. La mayoría de los imputados que estarán en el banquillo fueron oficiales y suboficiales de la Armada, algunos de los cuales ya recibieron condenas en el juicio "ESMA II". El "ESMA I" tuvo un solo acusado, el ex prefecto Héctor Febres, quien se suicidó en 2007 ingiriendo cianuro en vísperas del veredicto.
La apertura del juicio fue transmitida en simultáneo en un auditorio del Instituto Espacio para la Memoria creado en la ex ESMA.
El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) identificó en 2005 varios cadáveres aparecidos en la costa atlántica argentina en 1977 y certificó que presentaban fracturas posiblemente causadas por la caída desde gran altura y el impacto con el agua.
Entre las víctimas de los "vuelos de la muerte" identificadas estaban la fundadora de las Madres de Plaza de Mayo -que buscan a sus hijos desaparecidos durante la dictadura-, Azucena Villaflor de Devicenti, y la monja fracesa Leonie Duquet, que habían sido secuestradas por grupos de tareas de la ESMA. (DPA-Télam)