La vieja armada "purpurada" comienza a despedirse

Pase lo que pase, hoy será la última vez en el frente para tres soldados del batallón "purpurado": Pablo Varela, Álvaro López González y Diego Carrizo. El trío es parte de la vieja armada que en 2002 cortó una sequía de 38 años sin títulos anuales para Cardenales.

"Ya lo venía pensando desde hace rato, así que lo tomo con mucha tranquilidad", asegura Varela, de 37 años. Con los 21 que tiene de experiencia en Primera, su serenidad es más que comprensible.

"Lo verdaderamente importante es que el equipo gane y seamos campeones. Sería lindo retirarme con un título, pero a esta altura no es algo que me desespere", confiesa el segunda línea.

Lo de López González es cuando menos para meditarlo dos veces: a un partido de su retiro, es el tryman del equipo en el torneo con cuatro conquistas y un rendimiento al que no le pasaron los años.

"No, este ya es en serio el último", jura el wing. "No había podido jugar mucho ultimamente a causa de las lesiones, pero ahora estoy teniendo buenos partidos por suerte, y el broche de oro sería ganar la final", agrega.

El resto de la camada nunca hizo ningún anuncio, salvo Felipe Billone, al que la senda del éxito lo convenció de dar marcha atrás y tirar un añito más.