06 Noviembre 2012
1• Porque lo que nos enseñan no nos interesa, y no nos interesa porque no le vemos sentido, uso, utilidad, el para qué. Una cantidad de materias que no nos perfilan en lo que queremos ser y hacer en la vida.
2• Porque no entendemos, y no entendemos porque el lenguaje que se utiliza es un lenguaje que no comunica, muy rebuscado, elevado.
3• Porque las didácticas y las metodologías no están acordes con eso que se quiere enseñar. Un profesor, por lo general, habla para él, con métodos que no nos llegan, máxime que nosotros somos el resultado y el producto de otras generaciones y hay docentes todavía con el mismo esquema, los mismos ejercicios, las mismas fotocopias.
4• Porque nosotros estamos en una orilla y los maestros en otra; es decir, porque a pesar de la singularidad de cada uno de los estudiantes, todos somos mundos diferentes, con situaciones, problemas y vivencias particulares, y en la otra orilla está el docente con otro mundo, mirándonos desde su mirada y no desde la nuestra.
5• Porque no todos aprendemos de la misma manera, al mismo ritmo, con los mismos "truquitos".
6• Porque no todos venimos de la misma cuna, de la misma región, ciudad, del mismo colegio.
7• Porque algunos tenemos intereses muy específicos: ¿para qué estudio?, ¿por qué estudio esto y no otra cosa? ¿Por qué meterme la investigación por las narices cuando a mí eso no me gusta?
2• Porque no entendemos, y no entendemos porque el lenguaje que se utiliza es un lenguaje que no comunica, muy rebuscado, elevado.
3• Porque las didácticas y las metodologías no están acordes con eso que se quiere enseñar. Un profesor, por lo general, habla para él, con métodos que no nos llegan, máxime que nosotros somos el resultado y el producto de otras generaciones y hay docentes todavía con el mismo esquema, los mismos ejercicios, las mismas fotocopias.
4• Porque nosotros estamos en una orilla y los maestros en otra; es decir, porque a pesar de la singularidad de cada uno de los estudiantes, todos somos mundos diferentes, con situaciones, problemas y vivencias particulares, y en la otra orilla está el docente con otro mundo, mirándonos desde su mirada y no desde la nuestra.
5• Porque no todos aprendemos de la misma manera, al mismo ritmo, con los mismos "truquitos".
6• Porque no todos venimos de la misma cuna, de la misma región, ciudad, del mismo colegio.
7• Porque algunos tenemos intereses muy específicos: ¿para qué estudio?, ¿por qué estudio esto y no otra cosa? ¿Por qué meterme la investigación por las narices cuando a mí eso no me gusta?
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