01 Noviembre 2012
CAMINATA EN NUEVA YORK. El presidente abraza a algunos de los afectados por el huracán. AFP
NUEVA YORK, Estados Unidos.- Nada como un desastre natural para poner a prueba las convicciones de los políticos acerca de la política doméstica, y el huracán "Sandy", con su secuela de devastación y muerte en toda la costa Este de Estados Unidos, está cumpliendo esa función en la campaña electoral para la presidencia.
El presidente y candidato demócrata, Barack Obama, parece fortalecerse a medida que se posiciona como "comandante en jefe" de la reconstrucción, visitando las ciudades afectadas y hablando con las víctimas, emitiendo órdenes a los jefes de agencias de emergencia y transmitiendo la impresión de que ignora la cercanía de los comicios.
Ayer en Nueva Jersey, durante un encuentro con algunos de los afectados por la enorme tormenta, el mandatario prometió que los responsables de los distintos niveles del Gobierno van a ocuparse de paliar esta catástrofe.
Su rival republicano, en cambio, empieza a patinar en el mismo pantano que él mismo creó con sus declaraciones contra la ayuda estatal a los sectores socialmente más vulnerables. Ahora, con la mirada de los afectados por la "supertormenta" puesta sobre los candidatos, Mitt Romney tuvo que salir a asegurar que, si consigue llegar a la Presidencia, no dejará desamparadas a las víctimas del huracán.
"Ahora resulta que, después de que 'Sandy' azotó la costa Este, Romney apoya a la agencia gubernamental a cargo de paliar los desastres -publicó el diario digital Huffington Post-. Hace sólo un año, cuando peleaba por ser el candidato de los republicanos, decía que la ayuda estatal era 'simplemente inmoral' y que hipotecaba el futuro de los niños". (AFP-NA-Huffingtonpost.com)
El presidente y candidato demócrata, Barack Obama, parece fortalecerse a medida que se posiciona como "comandante en jefe" de la reconstrucción, visitando las ciudades afectadas y hablando con las víctimas, emitiendo órdenes a los jefes de agencias de emergencia y transmitiendo la impresión de que ignora la cercanía de los comicios.
Ayer en Nueva Jersey, durante un encuentro con algunos de los afectados por la enorme tormenta, el mandatario prometió que los responsables de los distintos niveles del Gobierno van a ocuparse de paliar esta catástrofe.
Su rival republicano, en cambio, empieza a patinar en el mismo pantano que él mismo creó con sus declaraciones contra la ayuda estatal a los sectores socialmente más vulnerables. Ahora, con la mirada de los afectados por la "supertormenta" puesta sobre los candidatos, Mitt Romney tuvo que salir a asegurar que, si consigue llegar a la Presidencia, no dejará desamparadas a las víctimas del huracán.
"Ahora resulta que, después de que 'Sandy' azotó la costa Este, Romney apoya a la agencia gubernamental a cargo de paliar los desastres -publicó el diario digital Huffington Post-. Hace sólo un año, cuando peleaba por ser el candidato de los republicanos, decía que la ayuda estatal era 'simplemente inmoral' y que hipotecaba el futuro de los niños". (AFP-NA-Huffingtonpost.com)