La percepción manda por por sobre lo que pensamos

"Cuando vemos un recién nacido los adultos nos acercamos a tocarlo. Por suerte el niño no puede hablar porque, si pudiera, diría que está muy asustado. Lo que él ve es alguien que se está agrandando a gran velocidad, porque en realidad esa es la imagen que tiene en la retina. El adulto no lo ve así porque el cerebro le impone la idea de que los seres humanos no se agrandan en segundos, y ese es un conocimiento de cómo funciona el mundo. La percepción hace que veás como ves sin necesidad de estar haciendo cómputos".

En LA GACETA, Alejandro Maiche ejemplifica y define con esta anécdota cómo funciona la percepción visual. Él es psicólogo y tiene mucha experiencia en investigaciones del sistema de la visión.

"En el mundo, los que estudian la percepción suelen ser psicólogos porque tiene mucho que ver con las ideas que tenemos del mundo -explica-. Cómo las ideas configuran nuestra manera de percibir es más de los mecanismos de bajo nivel; cómo entra la luz en el sistema visual. Es un campo interdisciplinario donde hay biólogos, ingenieros y físicos, pero también psicólogos por los modos de alto nivel que vienen a complementar".

- Usted dio una charla que se llamó "Ver para creer o creer par ver".

- Se trata de jugar con las ideas de que necesitamos ver para creer, porque las ideas del mundo las configuramos a partir de los datos visuales y de la información que tenemos del mundo, pero también vamos heredando datos en función de la experiencia.

- ¿Cuánto sabe el hombre de hoy sobre percepción visual?

- Es de los procesos que más se han estudiado porque es uno de los que más usamos, y también porque han sido muy exitosos los programas de investigación interdisciplinarios. Sabemos mucho más de percepción visual que de auditiva, gustativa, olfativa o táctil.

- ¿Cuánto falta conocer?

- Este es un camino que no se acaba. En realidad no creo que lleguemos nunca a entender completamente el funcionamiento del cerebro y el sistema perceptual en sí mismo. Lo que hay que medir es lo que se ha avanzado, y se ha avanzado mucho. Sobre todo en técnicas de imaginería visual hay muchísimas herramientas que nos permiten ver el funcionamiento del cerebro en vivo.

- ¿Qué aporta este conocimiento científico?

- Hay toda una discusión sobra cuál es la ciencia básica y cuál la aplicada o para qué sirven. Lo que yo hago es ciencia básica en cuanto sirve para entender. Lo que no sirve es estudiar cosas sin entender porque es mucho más caro, sobre todo sin entender desde el conocimiento local. Podemos comprar el conocimiento básico afuera, pero cuando algo no funciona tenemos que llamar a expertos alemanes o chinos que nos vengan a arreglar.

- ¿Qué aplicaciones prácticastiene el estudio de la percepción en el mundo de hoy?

- En seguridad vial hay muchísimas aplicaciones. En el Departamento de Luminotecnia (UNT) se están iniciando en esa línea. En campañas de prevención se maneja en esa típica lógica de "yo le voy a decir a usted que tiene que ir más despacio", que ya probó que no da mucho resultado. Podríamos plantearnos actuar a nivel de la percepción del sujeto, por ejemplo, para que disminuya la velocidad en ruta o en autopista.

- ¿De qué manera?

- En Europa las líneas entrecortadas de los carriles están pintadas más cerca, por eso la sensación de velocidad aumenta cuando vas a salir o a entrar en un pueblo. Obligan al conductor a salir del acostumbramiento a la alta velocidad. La percepción tiene esa gran ventaja: manda incluso por sobre lo que podemos pensar. En Uruguay tenemos un centro de investigación básico en psicología y estamos trabajando en otras áreas, como el rotulado de los productos alimenticios. En materia de señales urbanas hay mucho para trabajar. Debería haber investigación asociada en el área fomentada desde las mismas instituciones de gobierno. Si no generamos investigación asociada a nuestros problemas va a ser difícil que podamos solucionarlos.