05 Agosto 2012
"El avance de la medicina estética es abrumante: cada vez hay más tratamientos y más aparatos. El problema es que hay muchos negocios que ofrecen terapias estéticas y que no tienen médicos o profesionales a cargo y eso significa un riesgo para salud de la población", advirtió Cristina de Kaplan, del departamento de Fiscalización del Siprosa. La funcionaria explicó que por estos días se están reuniendo con profesionales de diferentes áreas para poder confeccionar una normativa que regule esta actividad. "Nosotros estamos haciendo inspecciones en los centros de estética; algunos -los más serios- ya cuentan con médicos supervisores. Clausurar los institutos que no los tienen es imposible porque todavía no hay una norma que los prohiba", explicó. "Estamos estudiando la situación, viendo cómo legislaron otros países. Hay cosas que pueden hacerse en establecimientos que no son de salud, como peluquerías. Pero en la mayoría de las técnicas y aparatos hay riesgos y deberían ser usados por profesionales", dijo.
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