¿Y ahora con quién juega?

¿Y ahora con quién juega?

Haber perdido la columna vertebral del equipo, parece no asustar a Falcioni ni a Boca

19 Julio 2012
BUENOS AIRES. El último apagará la luz... Boca era súper candidato de todo en América. Pero perdió el torneo de cabotaje y después recibió dos golpes en uno. Corinthians lo durmió en la final de la Libertadores y Juan Román Riquelme, quiérase o no, también participó de la volteada. Antes y después de la definición de aquella pesadilla en San Pablo, el 10 la jugó de 0 y Boca, su Boca, al que asegura amar con pasión lo padeció.

Se fue Román y agitó una serie de apagón, sin quererlo. Sin pedir permiso dio un paso al costado. Para algunos, en especial (bien podría decirse) para Julio Falcioni y Daniel Angelici, el adiós del crack fue una bocanada de aire fresco. Error. Porque hoy, cuando restan semanas para encender motores en el debut del Torneo Inicial del fútbol nuestro de cada día, y para la definición de la Copa Argentina con Racing, en San Juan, el "xeneize" perdió lo más importante de su estructura: la columna vertebral del 11 titular del "Emperador". ¿Cómo sucedió tal cosa? Román se fue y, aunque él no tenga mucho que ver, se creó una bola de nieve inmensa que nadie puede frenar. Facundo Roncaglia abandonó el carril derecho (firmó en Fiorentina) antes de ir por la revancha contra "o timao". Luego le siguió Darío Cvitanich, obligado a pegar la vuelta a Holanda, donde Ajax es dueño de su destino deportivo. Otro que emigró a Europa es Gastón Sauro.

Luego llegó el bombazo inesperado: con Agustín Orión lesionado y fuera de combate por un tiempo, el arco debía pertenecer al uruguayo Sebastián Sosa. Pero no, el charrúa rumbeó por la ruta a Liniers y fichó para Vélez. O sea, de tener dos grandes guardianes, Falcioni se quedó sin manos.

Para colmo, Javier García (no se presentó a la pretemporada) no es de su agrado, pese a haber disfrutado de una gran temporada en Tigre. ¿Llegará el libre Oscar Ustari?

En el medio, Riquelme no conducirá a nadie; adelante, se extrañará el vértigo del chico Sergio Araujo, con destino de Barcelona B, y los goles del suplente Lucas Viatri cuyo préstamo fue arreglado por una temporada con Villarreal, de España. Sigue... Todavía hay chances de que Pablo Mouche emigre a probar suerte en otro club del exterior.

O sea, el DT, de irse "Pablito", perdería a tres hombres con puesto de extremo, y a un punta definido como Viatri. Boca, de ostentar un poder ofensivo inquietante, hoy sólo cuenta con Nicolás Blandi y Santiago Silva -un "Tanque" con poco gol y mucha asistencia-, dos que van por adentro. ¿Llegaron refuerzos? Ninguno, aunque sí hubo regresos de préstamos. Pero ninguno, léase bien, puede darse el lujo de prender la luz. (Especial)

ex reemplazo de súper nivel

Cuando se recuperó de una lesión de ligamentos, Lucas Viatri pidió pista. Era el cambio natural de Silva, por encima de Blandi. Se fue a Villarreal.

Barcelona B, una tentación

Sergio Araujo era el sexto delantero en la consideración del DT. Por eso prefirió probar suerte en el segundo equipo "culé". Su sueño de jugar con Messi late.

La despedida más dolorosa

Después de perder contra Corinthians, Riquelme anunció que se iba. "Me siento vacío", dijo. Central va por él, pero deberá pagar U$S 2,3 millones.

No pagaron por "Cvita"

Darío Cvitanich empezó mal, mejoró mucho, se afianzó y luego perdió el puesto con Mouche. En La Ribera debían comprar su pase a Ajax. No invirtieron.

Atajó, pero se fue volando

Lesionado Orión, Sebastián Sosa era el dueño del arco. Pero no regresó de sus vacaciones. Fichó en Vélez, que le ofreció tres años de contrato.

Libre, enojado y a italia

Facundo Roncaglia no renovó y se fue a Fiorentina. Se perdió la final de la Copa y después atacó a "JC" por la ida de "JR". Boca no tiene lateral derecho.

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