Al rescate de músicos olvidados

Por Roberto Espinosa 23 Mayo 2012

La memoria frágil suele ser una característica de los argentinos que extraviamos en las puertas del olvido pedazos de nuestra historia o a connacionales que han aportado su talento para el crecimiento del país en algunos de sus múltiples aspectos. Poco se conoce acerca de la generación de compositores nacidos entre 1820 y 1850, que tienen por precedentes a Alberdi y Esnaola y por consecuentes, a Williams y Aguirre. En las obras de Alfredo Napoleón, Dalmiro Costa, Francisco Hargreaves, Miguel Rojas, Federico Espinosa, Telésforo Cabero, Ignacio Álvarez, Zenón Rolón y Luis Bernasconi sobrevuelan aires de Beethoven, Schubert y sobre todo, Chopin. Sobresalen la imponente Gran Fantasía de Concierto sobre el Himno Nacional, del portugués Napoleón y "Lágrimas y sonrisas", vals de Bernasconi. Manuel Massone muestra su jerarquía pianística en este valioso CD, donde vuelve a la vida a esta generación olvidada.

El segundo disco de Los Surcos arranca bien arriba. Con la zamba "Cuando llegue el alba" demuestran sus dotes vocales, pero en la medida justa: el virtuosismo no opaca lo más importante, la canción. El conjunto de los hermanos Carlos y Fernando Sosa (devenido en cuarteto con la incorporación de Gonzalo Pastrana y Carlos Luna) acierta con las interpretaciones de clásicos como "Largos caminos me iré" (con la excelente colaboración de Canto 4), "Viene Clareando", "Piedra y camino" y "De Simoca". Los puntos flojos pasan por el lado romántico: el bolero "Escándalo" y las canciones "Te propongo" (con Facundo Toro) y "Nada tengo de tí" empalagan. Igual, el que quiera sacarse las dudas puede ir a escucharlos el viernes en el teatro Alberdi.