08 Abril 2012
AÑORANDO. Paula extraña Barcelona. "Siempre la amaré", dice. LA GACETA / FOTO DE HECTOR PERALTA
Además de la crisis, hay otras cosas que empujan a los inmigrantes argentinos que están en España a volver a casa: ver a sus hijos crecer lejos de sus abuelos. Fue el caso de Paula Santillán, una psicóloga tucumana de 37 años. Se había ido a Europa con su esposo por dos años, en 1999. Cumplido ese ciclo, cuando volvió a Tucumán y vio que el panorama no era muy alentador, decidieron volverse al viejo continente. Pero esta vez el destino elegido fue Barcelona.
"Nos fuimos muy jóvenes más que nada para estudiar y adquirir experiencia laboral. En el medio, tuvimos dos hijos. Siempre pensamos en volver. La decisión surgió antes que mi hija mayor arrancara con el circuito de escolaridad", resaltó la profesional, que retornó el año pasado a Argentina.
"En España había mucho malestar. Se veía un rechazo cada vez mayor a la inmigración. Se nos veía a los inmigrantes como personas que les estábamos robando el trabajo a los españoles. Ellos ya se olvidaron de que Argentina les abrió las puertas de par en par hace unos 100 años", comentó la joven, que ya logró conseguir trabajo en Tucumán. Paula siente orgullo por la patria que la adoptó los últimos años. "Me quedé con el corazón partido. Añoro muchas cosas de España. Siempre la amaré. Espero que pueda recuperarse pronto", reflexionó.
"Nos fuimos muy jóvenes más que nada para estudiar y adquirir experiencia laboral. En el medio, tuvimos dos hijos. Siempre pensamos en volver. La decisión surgió antes que mi hija mayor arrancara con el circuito de escolaridad", resaltó la profesional, que retornó el año pasado a Argentina.
"En España había mucho malestar. Se veía un rechazo cada vez mayor a la inmigración. Se nos veía a los inmigrantes como personas que les estábamos robando el trabajo a los españoles. Ellos ya se olvidaron de que Argentina les abrió las puertas de par en par hace unos 100 años", comentó la joven, que ya logró conseguir trabajo en Tucumán. Paula siente orgullo por la patria que la adoptó los últimos años. "Me quedé con el corazón partido. Añoro muchas cosas de España. Siempre la amaré. Espero que pueda recuperarse pronto", reflexionó.
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