Los riojanos, cada vez más comprometidos

Esta mañana se desarrolló una nueva jornada del juicio oral y público por la desaparición de María de los Angeles "Marita"  Verón y en la apertura de los testimonios, Amalia, madre de la joven que declaró ayer, comprometió aún más a los imputados Lidia Irma Medina y a su hijo José Fernando "Chenga" Gómez.

El juicio se reanudará mañana, a las 8.30, con una nueva ronda de testigos vinculados a la pista riojana de la desaparición de "Marita".

La mujer narró que un día su hija desapareció de su casa. Cuando comenzó a buscarla por distintos lugares de la provincia, un hombre se contactó con ella y le dijo que su hija había sido detenida. Después, pudo averiguar que fue llevada hacia La Rioja.

Allí, enterada que estaba en una "whiskería", hizo contacto con "la mamá Lili", como era conocida Medina, quien le dijo: "a tu hija no te la llevarás, pagué mucho por ella. Y más vale que no avises a la Policía de Tucumán, la tenemos vigilada".

Luego, narró que posteriormente estableció un nuevo contacto con "Lili", a quien mintió -en un acto de desesperación- que la abuela de la joven estaba en grave estado, por lo que necesitaba llevársela. Frente a ello, la madama accedió.

"El 'Chenga' la trajo y cuando mi hija me vio, corrió hacia mis brazos y lloramos. Gómez le rogaba que regresara, pero no lo hizo", recordó, nerviosa, ante los jueces. LA GACETA ©