24 Febrero 2012
El Gobierno nacional querella, pero no sanciona
De Vido señaló que la Presidenta dispuso seguir el trámite judicial "en defensa del interés público" y afirmó que no se protegerá a nadie. El funcionario dijo que no avanzará con medidas administrativas contra la empresa hasta que la Justicia no concluya su labor. Schiavi dispuesto a ir al Congreso.
SCHIAVI Y DE VIDO. Los funcionarios explicaron la postura del Ejecutivo. DYN
BUENOS AIRES.- El Gobierno nacional se presentará ante la Justicia como "particular querellante" por la tragedia ocurrida el miércoles en el ferrocarril Sarmiento, que provocó la muerte de 50 personas y más de 700 heridos en Once, al tiempo que adelantó que esperará la decisión del tribunal, antes de aplicar sanciones administrativas contra la empresa TBA, concesionaria de ese servicio.
Así lo anunció ayer el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, quien brindó una conferencia de prensa -en la que no se aceptaron preguntas- junto con el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, en donde aclaró que no es intención del Poder Ejecutivo "generar un esquema de protección para nadie", al explicar los motivos por los cuales no se sancionaría de inmediato a TBA.
Sin problemas
Por su parte, Schiavi sostuvo que no tiene "problemas en ir al Congreso" para responder la requisitoria de los legisladores, como consecuencia del accidente, pero consideró que no creía "que este sea el momento" para hacerlo.
Durante la conferencia, De Vido sostuvo que "no hay palabras que puedan describir el dolor que nos embarga a todos los integrantes del Gobierno nacional" y expresó "las condolencias" para los familiares de las víctimas de la tragedia, ocurrida en una formación del Sarmiento cuando ingresaba a la cabecera de la estación Once.
Por instrucciones
En cuanto a la determinación de actuar como "particular querellante" en la causa, De Vido explicó que recibió "la instrucción de la Presidenta (Cristina Fernández)" para hacerlo "en defensa del interés público".
El titular de Planificación aclaró también que "de ninguna manera vamos a tomar desde el punto de vista administrativo acciones descontextualizadas del accionar de la Justicia", por lo que desechó la aplicación de sanciones contra TBA antes de que se expida la Justicia. De todos modos, especificó que "una vez que estén determinados los motivos (del accidente), lo administrativo irá acompañado por lo judicial para aplicar las sanciones que pudieran corresponder".
"Acá no se generarán esquemas de protección para nadie", enfatizó el ministro, con el propósito de aclarar la decisión del Gobierno y adelantó que "en las próximas horas, el juez (que interviene en la causa) designará a los peritos" que participarán en la investigación.
Sin culpas
Por su parte, Schiavi deslindó responsabilidades del Estado en la operación ferroviaria y señaló que salvo el tren que va a Mar del Plata, otro en el Chaco y un tercero en Lincoln, los demás "son operados por empresas privadas".
El secretario de Transporte comentó también que "en el momento de la entrada" del tren a la estación Once, "el conductor tuvo una señal de que otro tren se cruzaba, por lo que tuvo que haber aminorado la velocidad".
El funcionario señaló que "la incógnita" del accidente "está en los 40 metros finales" del trayecto de la formación que, según había señalado ayer, iba a 20 kilómetros por hora. También sostuvo que "la formación (que tuvo el accidente) entró en servicio a las 2.45 (de ayer) y realizó cinco servicios, es decir 10 viajes".
"Desde las 2.45 (en adelante) no tenemos ningún reporte de que hubiera habido detección de fallas en el sistema de freno", indicó Schiavi, quien puntualizó que el conductor de la formación accidentada "tomó servicio a las 7.49, es decir 51 minutos antes". (DyN)
Así lo anunció ayer el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, quien brindó una conferencia de prensa -en la que no se aceptaron preguntas- junto con el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, en donde aclaró que no es intención del Poder Ejecutivo "generar un esquema de protección para nadie", al explicar los motivos por los cuales no se sancionaría de inmediato a TBA.
Sin problemas
Por su parte, Schiavi sostuvo que no tiene "problemas en ir al Congreso" para responder la requisitoria de los legisladores, como consecuencia del accidente, pero consideró que no creía "que este sea el momento" para hacerlo.
Durante la conferencia, De Vido sostuvo que "no hay palabras que puedan describir el dolor que nos embarga a todos los integrantes del Gobierno nacional" y expresó "las condolencias" para los familiares de las víctimas de la tragedia, ocurrida en una formación del Sarmiento cuando ingresaba a la cabecera de la estación Once.
Por instrucciones
En cuanto a la determinación de actuar como "particular querellante" en la causa, De Vido explicó que recibió "la instrucción de la Presidenta (Cristina Fernández)" para hacerlo "en defensa del interés público".
El titular de Planificación aclaró también que "de ninguna manera vamos a tomar desde el punto de vista administrativo acciones descontextualizadas del accionar de la Justicia", por lo que desechó la aplicación de sanciones contra TBA antes de que se expida la Justicia. De todos modos, especificó que "una vez que estén determinados los motivos (del accidente), lo administrativo irá acompañado por lo judicial para aplicar las sanciones que pudieran corresponder".
"Acá no se generarán esquemas de protección para nadie", enfatizó el ministro, con el propósito de aclarar la decisión del Gobierno y adelantó que "en las próximas horas, el juez (que interviene en la causa) designará a los peritos" que participarán en la investigación.
Sin culpas
Por su parte, Schiavi deslindó responsabilidades del Estado en la operación ferroviaria y señaló que salvo el tren que va a Mar del Plata, otro en el Chaco y un tercero en Lincoln, los demás "son operados por empresas privadas".
El secretario de Transporte comentó también que "en el momento de la entrada" del tren a la estación Once, "el conductor tuvo una señal de que otro tren se cruzaba, por lo que tuvo que haber aminorado la velocidad".
El funcionario señaló que "la incógnita" del accidente "está en los 40 metros finales" del trayecto de la formación que, según había señalado ayer, iba a 20 kilómetros por hora. También sostuvo que "la formación (que tuvo el accidente) entró en servicio a las 2.45 (de ayer) y realizó cinco servicios, es decir 10 viajes".
"Desde las 2.45 (en adelante) no tenemos ningún reporte de que hubiera habido detección de fallas en el sistema de freno", indicó Schiavi, quien puntualizó que el conductor de la formación accidentada "tomó servicio a las 7.49, es decir 51 minutos antes". (DyN)
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