Susana Trimarco: "no tengo proyecto de vida; vivo para buscar a mi hija"

"A mi marido lo acusaron de que violaba a su hija. Se murió con ese dolor. Mientras yo no tenga paz, estos delincuentes tampoco".
"Es terrible que una madre tenga que aprender a vivir con el dolor".
"Mi hija soñaba con el primer día de clases de Micaela; tuve que estar yo".
"Acá estamos sentados para que aparezca mi hija. Ya la tuvieron 10 años".
"Yo no tengo proyecto de vida. Vivo para esto, para buscarla. Vivo una vida de porquería".
"Tengo la bombachita de tu hija, me escribían por mail".
"Me decían que me iban a secuestrar a mi nieta o que me iban a cortar la cabeza. Siempre viví bajo amenazas".
"Las hacían participar en fiestas del poder".
"Las cosas que me cuentan no tienen nombre".
"Si las chicas ven que los proxenetas están sentados con jueces, ¿cómo se van a escapar? Lo único que pueden hacer es sobrevivir".
"Anahí me decía que no la deje porque la Policía iba a devolverla. Entonces la llevé a mi casa".
"Después me contó su calvario. Me dijo que no la dejaban salir y que la Chenga Gómez la había agarrado a patadas".
"Nos costó mucho que la llamen a declarar a la enfermera Patricia Soria, de la Maternidad".
"Blanca Vides es otra víctima secuestrada a los 13 años. Ella me dio mucha información".

El relato de Susana Trimarco fue firme. Habló con seguridad. La madre de María de los Angeles "Marita" Verón continuó desde esta mañana y hasta pasado el mediodía con su declaración, en el juicio por el secuestro y desaparición de su hija, ocurridos la mañana del 3 de abril de 2002. El juicio se reanudará el miércoles, cuando Trimarco le dé continuidad a su relato y responda preguntas de las partes.

La audiencia comenzó a las 8.30. A lo largo de su relato, y tal como ocurrió ayer, la mujer planteó sus acusaciones sobre varios de los 13 imputados, a quienes tachó de "mafiosos" y "atorrantes". No ahorró palabras para funcionarios del Gobierno provincial de Julio Miranda y para jueces tucumanos y riojanos, a quienes acusó de corruptos y de mantener fiestas del poder. Los siguientes testigos que deberán declarar son Miguel Ardiles (el empleado de la maternidad que recibió a Marita), Patricia Soria (vecina de Marita) y Fátima Mansilla y su madre, que acusan a Daniela Milhein. LA GACETA ©