Educación pública, viajes, algoritmos e inversores

Educación pública, viajes, algoritmos e inversores

El camino que llevó a Matías García desde el Gymnasium a Cinemaki

28 Julio 2011
Durante la entrevista, Matías Alejo García hace referencia una y otra vez a la educación pública: egresó del Gymnasium, cursó dos años de Ingeniería en la UNT y se recibió de ingeniero nuclear en el Instituto Balseiro. Sus palabras, que insisten en este tópico, suenan a agradecimiento.

"Lungo" se fue de Tucumán y pensó que nunca más iba a regresar. Oriundo de barrio Sur, fanático de Quentin Tarantino y de Woody Allen, decidió pegar la vuelta cuando se casó con Miriam, la mamá de su hija Lucía.

En cuanto egresó del Balseiro empezó a trabajar en una empresa francesa que hacía software de monitoreo para centrales nucleares. Vivió en Buenos Aires, en Suiza y en Estados Unidos. "Compraba mucho por Internet usando páginas de comparación de precios. Y me di cuenta de que no existían en Argentina". Ahí nació el germen de Confronte. Lo desarrolló con Lucas Lain, ex alumno suyo en la UADE (Universidad Argentina de la Empresa). A los 18 meses empezaron a buscar inversores y "Clarín" compró el 100%.

Casi al mismo tiempo, dos directivos de Mercado Libre le ofrecieron trabajar juntos. "Lungo", que ya había desarrollado un algoritmo para un sitio de recomendación de películas, sumó a Lucas al proyecto y le dieron forma a Cinemaki.

Fue entonces cuando decidió volver a Tucumán. Y se trajo a Juan Ladetto, un tucumano que había trabajado en el diario "La Nación" y en Microsoft. "Lo más interesante es que apenas nos instalamos, a principios de 2010, conseguimos inversores, entre ellos un fondo inglés de los creadores de Skype", relató. Ahora enfrenta un nuevo desafío: la segunda ronda de inversores.

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