"Cuando él me pegaba, yo no me defendía"

"Mi ex marido es un profesional; no tenía ninguna adicción, pero sin que yo le diera motivo me agredía tratándome de mala mujer. Llegaba a la casa y generaba una situación de malestar que iba creciendo, y entonces me culpaba a mí, y venían las agresiones verbales y físicas. Yo tuve que irme de la casa. Lo más duro es que debí dejar a mis hijos", cuenta Graciela, casi llorando. "Yo me decía que tenía que tratar de entenderlo, que él estaba nervioso. Ya me había dicho que era así y que si yo me callaba, se le pasaba. Entonces, él me insultaba, y yo me callaba. Cuando me pegaba, yo me acurrucaba; no me defendía, porque tenía miedo de que me quebrará un brazo o me pegara más. Me decía ?no me contestés?, y yo no decía nada, pero me metía el dedo en la boca y me decía ?no me contestés mal porque te voy a arrancar la lengua?, y me daba chirlos, pero donde no se vean las marcas", revela Graciela. Y sigue con su estremecedor relato: "una vez me golpeó tanto que me hizo un corte en la cabeza. Fuimos al Centro de Salud, y durante todo el trayecto fue insultándome. Y me insultaba mal. La doctora que me atendió me preguntó qué me había pasado, y yo le tuve que decir que me había golpeado. Y cuando la doctora fue a buscar las cosas para coserme, él me amenazaba: ?hablá, decile, hacé quilombo...? Por supuesto que no dije nada. Entonces me di cuenta de que a él no hay nada que lo conmueva, es una persona perversa", asevera.

"Siempre me decía ?vos no tenés idea hasta donde llega mi maldad?. Ahora me doy cuenta a qué se refería, porque fue sacándome de a poco a mis hijos y poniéndolos en contra de mí", reflexiona.