Por Mirta Isabel Lazzaroni
28 Junio 2011
La mujer golpeada tiende a creer con el tiempo que ella provoca las situaciones de violencia, y va aprendiendo a "hacerse invisible" para no ocasionar problemas ni ser un obstáculo. Así lo explica la psicóloga Graciela Ferreira en su libro "La mujer maltratada". Entonces, conseguir que la mujer golpeada y que la violencia doméstica se haga cada vez más visible a los ojos de la comunidad es la tarea y el desafío que involucra a todos los sectores que aspiran a una sociedad democrática y justa. Y si bien falta mucho camino por recorrer, en Tucumán se ha avanzado bastante en esta materia. Mientras en la Ciudad de Buenos Aires se cuenta con un solo número telefónico para pedir ayuda en casos de violencia familiar, en Tucumán, durante los últimos años, se ha incrementado el número de organizaciones oficiales y privadas que se ocupan de las víctimas de agresiones. Es verdad que también aumentaron las denuncias, pero ese no es mal signo; es signo de que muchas mujeres están despertando.