27 Mayo 2011
EN PLENA CAMPAÑA. Duhalde encabezó un acto en Central Córdoba, donde criticó al Gobierno nacional. LA GACETA / ENRIQUE GALINDEZ
La visita que hizo ayer a Tucumán Eduardo Duhalde fue reparadora de la anterior. Ya instalado como candidato a presidente por el partido Unión Popular, el ex jefe de Estado vino a sepultar el papelón de la suspensión de la elección interna regional del Peronismo Federal con Alberto Rodríguez y logró hablar anoche ante un millar de personas en el club Central Córdoba. Allí prometió que, si retorna a la Casa Rosada, implementará en el norte del país un plan hambre cero, y aseguró: "estoy seguro (de) que el 10 de diciembre próximo, en el Congreso, Cristina Kirchner me pondrá la banda presidencial".
Antes del acto, en una entrevista con LA GACETA, Duhalde criticó al Gobierno nacional porque, a su criterio, no trata bien a los gobernadores que le son afines, como el tucumano, José Alperovich. "No me gusta que a los gobernadores argentinos, de cualquier ideología política, se los critique. En algún momento los gobernadores, Alperovich entre ellos, se van a cansar", aseveró.
Al respecto, cuestionó en particular a la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, que pidió a los tucumanos que no reelijan a Alperovich. "No puede venir una señora que está al lado de la Presidenta todos los días, puesta como ejemplo de los argentinos, a hablar mal del gobernador. Y tampoco pueden armarle una lista paralela kirchnerista. Es una vergüenza que hagan eso", sostuvo Duhalde.
Insistió en que los gobernadores se sublevarán. "Si no es ahora va a ser para la segunda vuelta, porque es insoportable cómo se tiene apretado al sector político, empresarial y de los medios. Estamos en una situación indeseable. A (Daniel) Scioli lo tratan igual; le van a poner hasta al secretario de Gobierno", afirmó.
Dijo que los gobernadores están maniatados por la plata federal: "Si no, no podrían pagar sueldos y se les daría vuelta la provincia".
También atacó a La Cámpora, organización peronista que lidera el hijo de la Presidenta, Máximo Kirchner. "Para el peronismo, ella (Cristina Fernández) representa al camporismo. El camporismo es un invento de ellos. Cámpora fue 59 días presidente y lo manejaban como un títere. Y se olvidan (de) que Perón, aunque estaba viejo, cuando volvió puso las cosas en orden. El país no sale con peleas. El camporista no entiende eso", afirmó.
Descartó que su ex ministro de Economía Roberto Lavagna vaya a ser su compañero de fórmula. "Es un hombre muy importante para cargos ejecutivos o para ser canciller. Tengo varios candidatos (a vicepresidente) y no los puedo mencionar. Lo que sí está claro es que no será ni pingüino ni pingüina", manifestó. Dijo que le gustaría que su candidata a gobernadora por la provincia de Buenos Aires sea la diputada Graciela Camaño y se refirió a la posibilidad de aliarse con Francisco de Narváez. "No cierro las puertas a nadie, pero tampoco lo voy a salir a buscar", aclaró.
En Central Córdoba, Duhalde habló después de Gerónimo "Momo" Venegas, líder de las 62 Organizaciones Peronistas y de Uatre, el gremio que movilizó asistentes junto a los gastronómicos, encabezados en el ámbito nacional por Luis Barrionuevo. Punteros políticos dijeron a LA GACETA que les costó movilizar personas al acto de Duhalde, debido a que el alperovichismo presionó a beneficiarios de planes sociales.
Antes del acto, en una entrevista con LA GACETA, Duhalde criticó al Gobierno nacional porque, a su criterio, no trata bien a los gobernadores que le son afines, como el tucumano, José Alperovich. "No me gusta que a los gobernadores argentinos, de cualquier ideología política, se los critique. En algún momento los gobernadores, Alperovich entre ellos, se van a cansar", aseveró.
Al respecto, cuestionó en particular a la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, que pidió a los tucumanos que no reelijan a Alperovich. "No puede venir una señora que está al lado de la Presidenta todos los días, puesta como ejemplo de los argentinos, a hablar mal del gobernador. Y tampoco pueden armarle una lista paralela kirchnerista. Es una vergüenza que hagan eso", sostuvo Duhalde.
Insistió en que los gobernadores se sublevarán. "Si no es ahora va a ser para la segunda vuelta, porque es insoportable cómo se tiene apretado al sector político, empresarial y de los medios. Estamos en una situación indeseable. A (Daniel) Scioli lo tratan igual; le van a poner hasta al secretario de Gobierno", afirmó.
Dijo que los gobernadores están maniatados por la plata federal: "Si no, no podrían pagar sueldos y se les daría vuelta la provincia".
También atacó a La Cámpora, organización peronista que lidera el hijo de la Presidenta, Máximo Kirchner. "Para el peronismo, ella (Cristina Fernández) representa al camporismo. El camporismo es un invento de ellos. Cámpora fue 59 días presidente y lo manejaban como un títere. Y se olvidan (de) que Perón, aunque estaba viejo, cuando volvió puso las cosas en orden. El país no sale con peleas. El camporista no entiende eso", afirmó.
Descartó que su ex ministro de Economía Roberto Lavagna vaya a ser su compañero de fórmula. "Es un hombre muy importante para cargos ejecutivos o para ser canciller. Tengo varios candidatos (a vicepresidente) y no los puedo mencionar. Lo que sí está claro es que no será ni pingüino ni pingüina", manifestó. Dijo que le gustaría que su candidata a gobernadora por la provincia de Buenos Aires sea la diputada Graciela Camaño y se refirió a la posibilidad de aliarse con Francisco de Narváez. "No cierro las puertas a nadie, pero tampoco lo voy a salir a buscar", aclaró.
En Central Córdoba, Duhalde habló después de Gerónimo "Momo" Venegas, líder de las 62 Organizaciones Peronistas y de Uatre, el gremio que movilizó asistentes junto a los gastronómicos, encabezados en el ámbito nacional por Luis Barrionuevo. Punteros políticos dijeron a LA GACETA que les costó movilizar personas al acto de Duhalde, debido a que el alperovichismo presionó a beneficiarios de planes sociales.
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