Por Martín Soto
25 Mayo 2011
"Parque de depresiones" | Guasones
MUY BUENO
Rock puro, corazones rotos y guitarras intensas con algunas dosis de pianos precisos. Eso son los principales condimentos que ofrece a lo largo de 55 minutos "Parque de depresiones", el noveno álbum de Guasones.
Con 13 pistas que por momentos suenan bien arriba y que de a ratos disminuyen notablemente sus revoluciones, la agrupación liderada por Facundo Soto evidencia maduración con sonidos preciso y sincronizados.
"Heaven or hell", el corte de difusión del nuevo trabajo, vuelca sobre los parlantes toda la potencia del quinteto platense, empujando a un pogo in situ. Sin embargo, temas con menos revoluciones como "Me estás tratando mal", "Perdón" y "La mansión del terror" invitan a anclar los zapatos en el suelo y a sacar a flote los sentimientos con historias nostálgicas y de desamor.
El compacto cuenta además con dos aditamentos que valen la pena destacar. Uno es un interesante cover de "El Forastero", creación de la mítica Riff, que comandaba Pappo. El segundo es un bonus track con un solo de teclado que da un cierre armonioso y pulcro al trabajo. "Parque de depresiones" asoma como un álbum atrayente, con sonidos frescos, digno de trasladar desde las bateas al archivo personal.
MUY BUENO
Rock puro, corazones rotos y guitarras intensas con algunas dosis de pianos precisos. Eso son los principales condimentos que ofrece a lo largo de 55 minutos "Parque de depresiones", el noveno álbum de Guasones.
Con 13 pistas que por momentos suenan bien arriba y que de a ratos disminuyen notablemente sus revoluciones, la agrupación liderada por Facundo Soto evidencia maduración con sonidos preciso y sincronizados.
"Heaven or hell", el corte de difusión del nuevo trabajo, vuelca sobre los parlantes toda la potencia del quinteto platense, empujando a un pogo in situ. Sin embargo, temas con menos revoluciones como "Me estás tratando mal", "Perdón" y "La mansión del terror" invitan a anclar los zapatos en el suelo y a sacar a flote los sentimientos con historias nostálgicas y de desamor.
El compacto cuenta además con dos aditamentos que valen la pena destacar. Uno es un interesante cover de "El Forastero", creación de la mítica Riff, que comandaba Pappo. El segundo es un bonus track con un solo de teclado que da un cierre armonioso y pulcro al trabajo. "Parque de depresiones" asoma como un álbum atrayente, con sonidos frescos, digno de trasladar desde las bateas al archivo personal.
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