04 Mayo 2011
ISLAMABAD.- Zarar Ahmed, de 12 años, es un residente de la pequeña ciudad de Abbottabad, y vecino de la mansión en donde Osama Bin Laden se había escondido con sus familiares y allegados durante los últimos cinco años hasta su muerte el fin de semana.
El pequeño Zarar contó que la familia del líder de Al Qaeda era amable con él y que le regaló dos conejos -que aún conserva en su hogar- en una de sus tantas visitas a la mansión de los Bin Laden. "Solía ir a su casa. Había dos mujeres, una hablaba árabe y la otra urdu. Había tres niños; dos varones y una nena", detalló durante una entrevista televisiva que recorrió el mundo.
"La casa tenía las paredes muy altas, así que no se podía ver nada de afuera. Se había instalado una cámara en la puerta de entrada para que pudieran ver a la gente que llegaba, y después de preguntarte algunas cosas recién se podía entrar", precisó el niño. (Especial)
El pequeño Zarar contó que la familia del líder de Al Qaeda era amable con él y que le regaló dos conejos -que aún conserva en su hogar- en una de sus tantas visitas a la mansión de los Bin Laden. "Solía ir a su casa. Había dos mujeres, una hablaba árabe y la otra urdu. Había tres niños; dos varones y una nena", detalló durante una entrevista televisiva que recorrió el mundo.
"La casa tenía las paredes muy altas, así que no se podía ver nada de afuera. Se había instalado una cámara en la puerta de entrada para que pudieran ver a la gente que llegaba, y después de preguntarte algunas cosas recién se podía entrar", precisó el niño. (Especial)
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