Por Roberto Espinosa
06 Abril 2011
"TANGO PARA CHICOS. VOL. 3" | Graciela Pesce
"Cómo me costaba despegarme de mamá,/ entregar mis besos y mis brazos a alguien más./ Pero pasó el tiempo y la seño me comprendió, me dejó llorar y patalear... me conquistó..." Cuando era changuito, su hijo le dijo que no le gustaba el tango porque no entendía las letras. Graciela Pesce, mamá y maestra jardinera, despabiló los duendes de la infancia en el campo, cuando un tío payador le descubrió a los 8 años los secretos de la guitarra y la improvisación. Se le ocurrió componer tangos, milongas y valses con letras que contaran las vivencias de los chicos. La experiencia dio frutos en tres CDs -se anuncia próximamente el cuarto- y Bulebú con Soda, un libro para los docentes. "Cuando vine al mundo, vine del solcito/ me escapé en un rayo, fui a dar a papito. Es lo que él me dice cuando estamos solos/ es nuestro secreto y por eso lo adoro...", dice el tango Ella que integra este volumen dedicado a los chicos de jardín, auspiciado por la Academia Nacional del Tango. En esta ocasión, Pesce, cuya calidez se plasma en su canto, cuenta con la complicidad del bandoneonista Leopoldo Federico y los cantantes Lidia Borda y Eduardo Smitd. "Uno y algunos y muchos dinosaurios pequeños y grandes pasaron por aquí. Trepando, volando, saltando, caminando... deslizándose en mi jardín", dice el Dinotango. Música, humor, juego, afecto, creatividad y poesía empapan este disco que es un regalo de la ternura.
"Cómo me costaba despegarme de mamá,/ entregar mis besos y mis brazos a alguien más./ Pero pasó el tiempo y la seño me comprendió, me dejó llorar y patalear... me conquistó..." Cuando era changuito, su hijo le dijo que no le gustaba el tango porque no entendía las letras. Graciela Pesce, mamá y maestra jardinera, despabiló los duendes de la infancia en el campo, cuando un tío payador le descubrió a los 8 años los secretos de la guitarra y la improvisación. Se le ocurrió componer tangos, milongas y valses con letras que contaran las vivencias de los chicos. La experiencia dio frutos en tres CDs -se anuncia próximamente el cuarto- y Bulebú con Soda, un libro para los docentes. "Cuando vine al mundo, vine del solcito/ me escapé en un rayo, fui a dar a papito. Es lo que él me dice cuando estamos solos/ es nuestro secreto y por eso lo adoro...", dice el tango Ella que integra este volumen dedicado a los chicos de jardín, auspiciado por la Academia Nacional del Tango. En esta ocasión, Pesce, cuya calidez se plasma en su canto, cuenta con la complicidad del bandoneonista Leopoldo Federico y los cantantes Lidia Borda y Eduardo Smitd. "Uno y algunos y muchos dinosaurios pequeños y grandes pasaron por aquí. Trepando, volando, saltando, caminando... deslizándose en mi jardín", dice el Dinotango. Música, humor, juego, afecto, creatividad y poesía empapan este disco que es un regalo de la ternura.
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