05 Enero 2011
FOTOGRAFO. Es vecino de Villa Alem y un fanático de las competencias.
Soy fanático del Rally Nacional, siempre saco fotos. Pero nunca me tocó una situación como esta: al principio no sabía bien qué sentir después de lo vivido. Eso sí, cuando vi el accidente me asusté, pero igual disparé. Ni siquiera me di cuenta de que había sacado la foto. A todos los pilotos los venía enfocando de arriba, y de abajo.
Con el paso de las horas me sentí orgulloso por haber sacado esta foto; minutos después de lo sucedido, como mínimo 100 personas vieron la foto. Yo dije: "fijate, creo que saqué la foto cuando se cayó Bollero y todos los que estaban alrededor quisieron verla".
A la zona de El Brete llegamos con mi familia el lunes, a eso de las 15. El vado tenía escalón de los dos lados porque era todo tierra y en el medio arena; de los dos lados de entrada y salida tenía un pequeño escalón, de un metro, un metro y medio, sin agua. El piso estaba blandito. Más tarde, cuando pasaron los camiones, destrozaron todo.
Cuando una moto parecía chiquita en el visualizador, ahí sacaba la foto. El resto de la gente le apuntaba al vado y lograba imágenes de cómo salían de él los vehículos; yo sacaba cuando se venían acercando a donde estaba yo. Me mezclé entre la gente, a la par de la ruta.
Cuando vi que volaba el tanque de nafta de la Yamaha pensé: "esta moto no sigue". El combustible se esparció varios metros.
Cuando se produjo el accidente no tuve que cruzar para verlo a Bollero porque él quedó de mi lado, a la izquierda de la ruta; la moto quedó del otro. Todos salieron corriendo porque sabían que era él. Cuando Rodolfo se levantó hubo aplausos, incluso los escuché hasta que lo subieron a la camilla, algo que no sé si era necesario porque antes estuvo un rato hablando por teléfono. Primero lo asistieron y después lo llevaron a la camilla.
Recuerdo que las motos, al salir del vado, se ponían de cola, pero los corredores las acomodaban. Pienso que Bollero no tuvo la reacción de volver el cuerpo para adelante y pararse en la moto, como lo hacían los demás. Además, pienso que como estaba en Tucumán, él venía muy fuerte a comparación de todos los otros que pasaron.
Con el paso de las horas me sentí orgulloso por haber sacado esta foto; minutos después de lo sucedido, como mínimo 100 personas vieron la foto. Yo dije: "fijate, creo que saqué la foto cuando se cayó Bollero y todos los que estaban alrededor quisieron verla".
A la zona de El Brete llegamos con mi familia el lunes, a eso de las 15. El vado tenía escalón de los dos lados porque era todo tierra y en el medio arena; de los dos lados de entrada y salida tenía un pequeño escalón, de un metro, un metro y medio, sin agua. El piso estaba blandito. Más tarde, cuando pasaron los camiones, destrozaron todo.
Cuando una moto parecía chiquita en el visualizador, ahí sacaba la foto. El resto de la gente le apuntaba al vado y lograba imágenes de cómo salían de él los vehículos; yo sacaba cuando se venían acercando a donde estaba yo. Me mezclé entre la gente, a la par de la ruta.
Cuando vi que volaba el tanque de nafta de la Yamaha pensé: "esta moto no sigue". El combustible se esparció varios metros.
Cuando se produjo el accidente no tuve que cruzar para verlo a Bollero porque él quedó de mi lado, a la izquierda de la ruta; la moto quedó del otro. Todos salieron corriendo porque sabían que era él. Cuando Rodolfo se levantó hubo aplausos, incluso los escuché hasta que lo subieron a la camilla, algo que no sé si era necesario porque antes estuvo un rato hablando por teléfono. Primero lo asistieron y después lo llevaron a la camilla.
Recuerdo que las motos, al salir del vado, se ponían de cola, pero los corredores las acomodaban. Pienso que Bollero no tuvo la reacción de volver el cuerpo para adelante y pararse en la moto, como lo hacían los demás. Además, pienso que como estaba en Tucumán, él venía muy fuerte a comparación de todos los otros que pasaron.
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