30 Diciembre 2010
SE TIENE FE. Marcos largará pese a su lesión, y no le teme a los desafíos. REUTERS
BUENOS AIRES (Enviado especial, Carlos Werner).- Su habitual verborragia trocó en silencios. Marcos Patronelli, el primer argentino en subirse a un podio del Dakar, en su cuatriciclo, tiene motivos de sobra para estar en máxima concentración. Apenas recuperado de su doble fractura de tobillos, intentará terminar la carrera aunque no le huye a los desafíos. Aún así, se dio tiempo para charlar con el enviado especial de LA GACETA.
El diálogo transcurrió junto a su "cuatri", mientras esperaba el momento de la revisión técnica. "Estoy bastante bien y como para largar. Quiero cumplir con la gente y con mis auspiciantes, que nos apoyaron", sostuvo. Admitió, además, que también decidió participar para apoyar a su hermano Alejandro, que el año pasado clasificó segundo.
De todos modos, anticipó: "en la medida que vaya haciendo kilómetros iré ganando en confianza y voy a acelerar". Mientras lo afirmaba mostró las férulas especiales que cubren sus tobillos, luego del accidente que tuvo a fines de noviembre durante un entrenamiento. LA GACETA ©
El diálogo transcurrió junto a su "cuatri", mientras esperaba el momento de la revisión técnica. "Estoy bastante bien y como para largar. Quiero cumplir con la gente y con mis auspiciantes, que nos apoyaron", sostuvo. Admitió, además, que también decidió participar para apoyar a su hermano Alejandro, que el año pasado clasificó segundo.
De todos modos, anticipó: "en la medida que vaya haciendo kilómetros iré ganando en confianza y voy a acelerar". Mientras lo afirmaba mostró las férulas especiales que cubren sus tobillos, luego del accidente que tuvo a fines de noviembre durante un entrenamiento. LA GACETA ©
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