09 Diciembre 2010
Washington.- ¿Se puede realmente parar Wikileaks? Así lo espera al menos el gobierno de EEUU, que ve todas las formas posibles de perseguir a su fundador, Julian Assange, y acallar su ya famoso sitio en internet, más aún tras haber sido detenido.
La historia de Wikileaks y su influencia cobran ahora más fuerza que nunca. La razón de ello está en parte, por supuesto, en la misión de diseminar información hasta ahora clasificada, afirmando que toda información debe ser pública. Pero la otra razón por la cual Wikileaks es imposible de acallar está en las tecnologías pasadas y presentes que han impulsado internet.
Parte del problema de acallar a Wikileaks estriba en que el sitio está siendo "reflejado" por más de 500 servidores en todo el mundo. Esto quiere decir esencialmente que una copia del sitio actual es mantenida en todos aquellos servidores, y, si uno de ellos es cerrado, sea por la empresa que lo aloja o por las autoridades del país, basta un simple cambio en el nombre de dominio del sitio (DSN) para desplazar a sus usuarios a otro de los sitios "espejo".
Esta es la razón principal por la cual las autoridades de cualquier país tienen dificultades en cerrar un portal de Internet que haya ganado respaldo y "espejos" en todo el mundo, tal como es el caso de Wikileaks. En el mundo interconectado de hoy, a menos que se consiga una cooperación sin precedentes de las autoridades de todos los países en los cuales resida un espejo del sitio, habrá siempre dificultades en cerrar operaciones del tipo Wikileaks. Y esto, especialmente, si los medios para financiar y hacer funcionar el sitio son compartidos también por mucha gente en todo el mundo.
Sitios con alto número de espejos tal como Wikileaks pueden ser acallados por un momento es decir, hasta que el registro DNS sea actualizado en un nuevo espejo activado. Pero, gracias a las redes sociales, gran parte del mensaje de Wikileaks y de las noticias sobre el lugar en que esté activo puede ser propagado hoy en día a través de las grandes sitios de redes sociales como Twitter y Facebook.
Ahora mismo, se puede hallar Wikileaks como "wikileaks" en Twitter (http://twitter.com/wikileaks). Allí se puede seguir la batalla entre quienes quisieran silenciarlo y los intentos de Wikileaks por mantener el sitio abierto. "Los servidores de Wikileaks en Suecia están siendo atacados", anunciaba hoy un "tweet" en Wikileaks. Después de todo, los ingredientes esenciales de Wikileaks no son precisamente secretos.
La historia de Wikileaks y su influencia cobran ahora más fuerza que nunca. La razón de ello está en parte, por supuesto, en la misión de diseminar información hasta ahora clasificada, afirmando que toda información debe ser pública. Pero la otra razón por la cual Wikileaks es imposible de acallar está en las tecnologías pasadas y presentes que han impulsado internet.
Parte del problema de acallar a Wikileaks estriba en que el sitio está siendo "reflejado" por más de 500 servidores en todo el mundo. Esto quiere decir esencialmente que una copia del sitio actual es mantenida en todos aquellos servidores, y, si uno de ellos es cerrado, sea por la empresa que lo aloja o por las autoridades del país, basta un simple cambio en el nombre de dominio del sitio (DSN) para desplazar a sus usuarios a otro de los sitios "espejo".
Esta es la razón principal por la cual las autoridades de cualquier país tienen dificultades en cerrar un portal de Internet que haya ganado respaldo y "espejos" en todo el mundo, tal como es el caso de Wikileaks. En el mundo interconectado de hoy, a menos que se consiga una cooperación sin precedentes de las autoridades de todos los países en los cuales resida un espejo del sitio, habrá siempre dificultades en cerrar operaciones del tipo Wikileaks. Y esto, especialmente, si los medios para financiar y hacer funcionar el sitio son compartidos también por mucha gente en todo el mundo.
Sitios con alto número de espejos tal como Wikileaks pueden ser acallados por un momento es decir, hasta que el registro DNS sea actualizado en un nuevo espejo activado. Pero, gracias a las redes sociales, gran parte del mensaje de Wikileaks y de las noticias sobre el lugar en que esté activo puede ser propagado hoy en día a través de las grandes sitios de redes sociales como Twitter y Facebook.
Ahora mismo, se puede hallar Wikileaks como "wikileaks" en Twitter (http://twitter.com/wikileaks). Allí se puede seguir la batalla entre quienes quisieran silenciarlo y los intentos de Wikileaks por mantener el sitio abierto. "Los servidores de Wikileaks en Suecia están siendo atacados", anunciaba hoy un "tweet" en Wikileaks. Después de todo, los ingredientes esenciales de Wikileaks no son precisamente secretos.