Dr. House seduce con su barba y ellos lo imitan

La barba transmite un mensaje a la sociedad, es un acto de rebelión, y en los más jóvenes, de autoafirmación de la masculinidad. Pero en este caso, es pura coquetería. El estilo casual o de dos semanas de vacaciones de la máquina de afeitar se impone en el mundo masculino. La imagen de Doctor House, la serie norteamericana que hace furor en casi todo el planeta parece haber cultivado más que un simple entretenimiento. El aire rudo y un tanto descuidado que le confiere esa barba al personaje le pone un toque se seducción que muchos quieren imitar.

En la Argentina muchos actores la adoptaron, como es el caso de los galanes de la novela Malparida, Raúl Taibo y Gonzalo Heredia, padre e hijo en la ficción.

"Esta barba queda muy bien pero cuando hay demasiada cana produce un efecto contrario, envejece, da un aspecto de descuido", reconoce el peluquero Freddy García. "Para usar este estilo hay que estar siempre impecable: un buen traje, un sport elegante ... son las opciones", aconseja.

Cuando la barba es muy blanca el corte casual no queda bien, al menos que se tiña. Vienen unos matizadores especiales para barba. "Debe ser del mismo color que el pelo, para que no desentone", advierte el estilista.

"La barba larga y abundante (tipo Fidel Castro o Sigmund Freud) sugiere agudeza mental, sabiduría y liderazgo, también marca un estatus, pero es difícil de mantener. Debe ser una barba muy cuidada. Además hay que tener en cuenta que la barba aumenta la edad", advierte el peluquero.

La elección de la barba no sólo depende de la moda, sino también de la forma del rostro. Queda muy bien en una cara delgada, cuidando que el pelo no invada la zona del cuello, de lo contrario, el rostro parecerá más alargado todavía. Si por el contrario se quiere afinar, la línea de definición superior debe ser un poco bajo para mostrar más piel y alargar ópticamente el rostro y la línea del cuello. La barba también disimula la papada y las mejillas hundidas.

Cómo evitar lastimarse
Siempre hay que rasurarse en sentido contrario al crecimiento del vello, de este modo la máquina de afeitar cortará con más facilidad y precisión.
El mejor momento para rasurarse es cuando los poros de la piel se relajan con el vapor del agua caliente.
Si hay pelos encarnados, lo mejor será no rasurar y esperar a que la barba crezca naturalmente.
Cuando uno se corta lo más recomendable es dejar secar la herida al aire libre y aplicar desinfectante.

Los oscuritos están de última moda
Como los "claritos" pero al revés. Los "oscuritos" sirven para tapar canas de una manera que parezca natural. "En realidad es un apagado de canas. Se hace una tintura que es exactamente igual al del color del pelo de la persona. Se coloca un gorro de goma (como se hace en la técnica de los "claritos")  y se sacan pequeñas mechitas para teñirlas. Luego se saca el gorro y se mezcla la cana con el pelo teñido, dejando un 50% de canas", explica el peluquero Freddy García, que tiene un lugar reservado, en su peluquería para hombres que no quieren ser vistos con el gorro puesto. El resultado de este método es un entrecano bastante seductor.

Cuidado con la patilla chueca
Los adolescentes usan las patillas desmechadas y un poco largas. Los hombres de mediana edad, en cambio, la llevan recta y a la mitad de la oreja. "La patilla tipo San Martín, Cacho Castaña o Sandro ya no va más", dice Freddy García. Y pone énfasis en la costumbre de cortarse la patilla mientras se bañan. "¡Se cortan mal, desparejas o muy cortitas, como le ocurre a menudo a Mauricio Macri. Hay que mirarse al espejo", aconseja.