28 Octubre 2010
La inesperada muerte del ex presidente Néstor Kirchner podría derivar en la reunificación del Peronismo, a partir de las crecientes posibilidades de que Daniel Scioli se transforme en el "candidato de todos".
A pocas horas del impredecible fallecimiento de Kirchner, el jefe de la CGT pero también titular del Peronismo bonaerense, Hugo Moyano, habló de "reestructurar" el partido, y del total apoyo a la presidenta Cristina Fernández, incluso si decide "continuar" después del 2011, es decir, ir por la reelección.
Moyano mantuvo así el mismo discurso que en los días anteriores, apoyando las candidaturas de "Néstor o Cristina", pero poniendo coto a Scioli, sobre quien dijo no tiene "posibilidades" de aspirar a la Casa Rosada.
Sin embargo, la lamentable pérdida del santacruceño ubica a Scioli como "el candidato" al que no sólo miran los intendentes del Conurbano bonaerense, quienes venían expresando en privado sus diferencias con la posibilidad de que los Kirchner fueran por un nuevo mandato, sino también un amplio sector del Peronismo Federal.
Incluso, fuentes peronistas indicaron que "los popes empresariales encuentran a Scioli como el candidato".
El propio Francisco de Narváez envió claros mensajes a Scioli para "dejar" el kirchnerismo. Al igual que algunos elogios provenientes de Eduardo Duhalde y de otros dirigentes de segunda línea del peronismo anti k.
Por ese entonces, el debate estaba centrado en si Scioli sería capaz de "despegar" de Kirchner o incluso de enfrentarlo, en caso de que el santacruceño o la presidenta se postularan. Pero la muerte del ex mandatario deja a Scioli el camino libre para aspirar al sillón presidencial, salvo que Cristina Fernández decida ir por la reelección.
Si bien realizar afirmaciones a pocas horas de la desaparición de la máxima figura política de la última década puede ser apresurado, es difícil repensar el kirchnerismo sin Néstor Kirchner. "Cristina no es Néstor", afirmaron, en muchas oportunidades, funcionarios y dirigentes influyentes del kirchnerismo, mas allá del respeto intelectual por la actual mandataria. Tampoco nadie sabe si la presidenta y esposa del santacruceño tendrá voluntad de ir por un nuevo mandato, sin su compañero de ruta y socio político de toda la vida. Lo que sí es claro es que al observar en el oficialismo, además de Scioli, sólo Moyano queda con cierto liderazgo político aunque es claramente rechazado por un importante sector del peronismo bonaerense y, desde ya, del Peronismo Federal. El resto de los dirigentes, que podrían aspirar a una candidatura presidencial, tienen chances poco claras. Salvo el acertijo alrededor de Carlos Reutemann.
En ese esquema, está claro que también disminuirían las expectativas del jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, que dependía de la alianza con un sector del peronismo, para consolidar una candidatura presidencial.
A pocas horas del impredecible fallecimiento de Kirchner, el jefe de la CGT pero también titular del Peronismo bonaerense, Hugo Moyano, habló de "reestructurar" el partido, y del total apoyo a la presidenta Cristina Fernández, incluso si decide "continuar" después del 2011, es decir, ir por la reelección.
Moyano mantuvo así el mismo discurso que en los días anteriores, apoyando las candidaturas de "Néstor o Cristina", pero poniendo coto a Scioli, sobre quien dijo no tiene "posibilidades" de aspirar a la Casa Rosada.
Sin embargo, la lamentable pérdida del santacruceño ubica a Scioli como "el candidato" al que no sólo miran los intendentes del Conurbano bonaerense, quienes venían expresando en privado sus diferencias con la posibilidad de que los Kirchner fueran por un nuevo mandato, sino también un amplio sector del Peronismo Federal.
Incluso, fuentes peronistas indicaron que "los popes empresariales encuentran a Scioli como el candidato".
El propio Francisco de Narváez envió claros mensajes a Scioli para "dejar" el kirchnerismo. Al igual que algunos elogios provenientes de Eduardo Duhalde y de otros dirigentes de segunda línea del peronismo anti k.
Por ese entonces, el debate estaba centrado en si Scioli sería capaz de "despegar" de Kirchner o incluso de enfrentarlo, en caso de que el santacruceño o la presidenta se postularan. Pero la muerte del ex mandatario deja a Scioli el camino libre para aspirar al sillón presidencial, salvo que Cristina Fernández decida ir por la reelección.
Si bien realizar afirmaciones a pocas horas de la desaparición de la máxima figura política de la última década puede ser apresurado, es difícil repensar el kirchnerismo sin Néstor Kirchner. "Cristina no es Néstor", afirmaron, en muchas oportunidades, funcionarios y dirigentes influyentes del kirchnerismo, mas allá del respeto intelectual por la actual mandataria. Tampoco nadie sabe si la presidenta y esposa del santacruceño tendrá voluntad de ir por un nuevo mandato, sin su compañero de ruta y socio político de toda la vida. Lo que sí es claro es que al observar en el oficialismo, además de Scioli, sólo Moyano queda con cierto liderazgo político aunque es claramente rechazado por un importante sector del peronismo bonaerense y, desde ya, del Peronismo Federal. El resto de los dirigentes, que podrían aspirar a una candidatura presidencial, tienen chances poco claras. Salvo el acertijo alrededor de Carlos Reutemann.
En ese esquema, está claro que también disminuirían las expectativas del jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, que dependía de la alianza con un sector del peronismo, para consolidar una candidatura presidencial.