02 Octubre 2010
EL QUID.- Lo que causó la violenta rebelión de policías y militares fue un plan del gobierno de Rafael Correa para recortar la burocracia (reducción de la nómina salarial en varias entidades), pero el presidente advirtió que no dará marcha atrás ya que el margen financiero se agotó.
EL PROBLEMA FINANCIERO.- Para 2010 el déficit fiscal de Ecuador se estima en U$S 2.000 millones, mientras que en 2009 fue de U$S 4.000 millones.
SIN CONDECORACIONES.- La ley regula los beneficios a los burócratas, incluidos policías y militares: elimina las condecoraciones y fija un piso y un techo a los salarios públicos; y amplía de cuatro a ocho horas la jornada laboral de médicos.
EL SECTOR PUBLICO.- Entre 2009 y 2010 se duplicaron los recursos para salarios públicos, de U$S 3.000 millones a U$S 6.500 millones. Este año se contabilizan 470.000 empleados públicos, un 40% del total de los trabajadores formales del país, de los cuales 100.000 (más de un 20%) fueron puestos creados por el gobierno de Correa.
ALTERNATIVAS.- Para recortar la nómina Correa planteó dos alternativas: pagar indemnizaciones por retiros voluntarios y despedir al personal que no supere una evaluación de competencias. La ley prevé pagar en efectivo el 100% de la jubilación a los empleados que se reiteren a la edad máxima de 70 años (antes sin límite) y un 50% a los demás, que recibirán el resto en bonos del Estado a cinco años con un interés anual de 7%.
"ESTO NO HA TERMINADO".- "No puedo decir que estemos totalmente tranquilos: mucha gente tal vez siga movilizada y pueda querer reproducir lo ocurrido", dijo el canciller, Ricardo Patiño.
LECTURA CIUDADANA.- "La situación fue grave y Correa tiene la culpa, pero la Policía hizo mal en dejar de patrullar y permitir que todo el mundo haga de las suyas", dijo William Chichande, un vendedor de almacén que aludió a desmanes civiles.
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