Una muerte sin traumas
30 Septiembre 2010
Romina Yan, madre de tres hijos, murió en la tarde del martes, a raíz de un paro cardíaco que sufrió presuntamente por un aneurisma cuando salía de un gimnasio.

Yan se descompuso en forma repentina, sufrió un desmayo y fue trasladada de urgencia al hospital de San Isidro por un amigo. La actriz llegó a la guardia de ese centro asistencial sin signos vitales, y tras 50 minutos de tareas de reanimación, se consignó su deceso a las 17.25. Por decisión de su familia, la joven artista no fue velada y su cuerpo fue sometido a una autopsia en la morgue del hospital de San Fernando. Los primeros estudios confirmaron que no había señales de golpes o traumas y las causas del fallecimiento se sabrán con mayor detalle con análisis complementarios. La actriz fue sepultada en la tarde de ayer.

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