04 Agosto 2010
A MEDIA MAQUINA. Las fábricas de Tucumán continúan trabajando, pese a las restricciones energéticas. LA GACETA / ARCHIVO
Los industriales tucumanos no quieren alzar su voz con quejas por la falta de gas, pero su preocupación va en aumento, de la mano del incremento en las restricciones del fluido cada vez que el termómetro baja en la Argentina. Tal como lo había adelantado LA GACETA, ayer la Secretaría de Energía de la Nación dispuso que suba el nivel de reducción del gas que utilizan las fábricas de todo el país. En Tucumán, la medida implicó que la merma en el suministro pasara a ser de un 40% a entre el 50% y el 60%, según confirmaron los industriales tucumanos.
En la provincia utilizan gas para trabajar 12 de los 15 ingenios, seis citrícolas y una papelera. Según informaron las mismas fuentes, ninguna de las fábricas dejó de operar por el incremento en las restricciones, pero sí disminuyó su poder de producción. En ese orden, el Ministerio de Planificación Federal indicó ayer que hubo un recorte del abastecimiento de gas natural a las industrias para priorizar el consumo residencial y aclaró que dicha provisión de gas se irá normalizando cuando haya pasado la ola de frío intenso que atraviesa el país.
Al respecto, voceros de Planificación indicaron a la agencia de noticias DyN que el corte de provisión de gas se realiza en aquellas industrias que tienen contratos de suministro interrumpible, es decir, que pagan menos por el fluido, considerando que en los meses del invierno pueden recibir un menor volumen que el gas contratado o, directamente, nada. La provisión de gas natural se realiza en un 85% con producción interna (aproximadamente 120 millones de metros cúbicos día), y el resto, alrededor de 15 mm3 día, se importa de Bolivia y vía barcos de gas natural licuado que es regasificado en puerto, en partes casi iguales.
En lo que respecta al consumo de electricidad, desde la cartera a cargo de Julio de Vido se estimó que por la persistencia de bajas temperaturas la demanda podría superar los 20.000 megavatios de potencia instalada, e incluso volver a marcar un nuevo récord histórico. Atentos a esta situación, consignaron que el sistema argentino de interconexión se está desenvolviendo sin problemas. La potencia máxima disponible del parque generador de energía ronda los 23.000 megavatios, pero se estima adecuado técnicamente operar disponiendo de una reserva no menor a los 2.000 megavatios.
En la provincia utilizan gas para trabajar 12 de los 15 ingenios, seis citrícolas y una papelera. Según informaron las mismas fuentes, ninguna de las fábricas dejó de operar por el incremento en las restricciones, pero sí disminuyó su poder de producción. En ese orden, el Ministerio de Planificación Federal indicó ayer que hubo un recorte del abastecimiento de gas natural a las industrias para priorizar el consumo residencial y aclaró que dicha provisión de gas se irá normalizando cuando haya pasado la ola de frío intenso que atraviesa el país.
Al respecto, voceros de Planificación indicaron a la agencia de noticias DyN que el corte de provisión de gas se realiza en aquellas industrias que tienen contratos de suministro interrumpible, es decir, que pagan menos por el fluido, considerando que en los meses del invierno pueden recibir un menor volumen que el gas contratado o, directamente, nada. La provisión de gas natural se realiza en un 85% con producción interna (aproximadamente 120 millones de metros cúbicos día), y el resto, alrededor de 15 mm3 día, se importa de Bolivia y vía barcos de gas natural licuado que es regasificado en puerto, en partes casi iguales.
En lo que respecta al consumo de electricidad, desde la cartera a cargo de Julio de Vido se estimó que por la persistencia de bajas temperaturas la demanda podría superar los 20.000 megavatios de potencia instalada, e incluso volver a marcar un nuevo récord histórico. Atentos a esta situación, consignaron que el sistema argentino de interconexión se está desenvolviendo sin problemas. La potencia máxima disponible del parque generador de energía ronda los 23.000 megavatios, pero se estima adecuado técnicamente operar disponiendo de una reserva no menor a los 2.000 megavatios.
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