01 Agosto 2010
RENOVACION. El ministro cree que el Ersact y el Epret pueden jerarquizarse.
Los entes reguladores de los servicios públicos nacieron en 1995, al amparo del proceso de desguace que vivió el Estado. Aunque con distintas competencias, tanto el Ente Provincial de Regulación de la Energía de Tucumán (Epret) como el Ente Regulador del Servicio de Agua y Cloacas (Ersact) surgieron con una filosofía común: convertirse en espacios adecuados para garantizar el pleno ejercicio de los derechos de los ciudadanos.
Pasaron 15 años del gran movimiento privatizador de los servicios de aguas y cloacas y de luz. Sin embargo, el control eficiente de las empresas prestadoras, ya sean privadas, como EDET; o estatales, como la Sociedad Aguas del Tucumán, sigue siendo uno de los principales reclamos de la ciudadanía. No es casual que cada tanto la clase política reinstale el debate sobre el rol de los entes reguladores.
Esta vez, la discusión es propiciada por el ministro de Desarrollo Productivo, Jorge Gassenbauer. Sin bien el Ersact y el Epret son organismos autárquicos, en la jerarquía del Estado se encuentran bajo la órbita de esa cartera. "Los estoy revisando a los dos; pasaron 15 años desde que se crearon y, a lo largo de este tiempo, cambiaron desde aspectos legales hasta conceptuales que hacen a las prestaciones de los servicios públicos y al control", adelantó a LA GACETA.
"A jerarquizarlos"
Al rediscutir el rol de los entes de control, resulta imposible introducir el debate sobre su eventual unificación. En rigor, los antecedentes más recientes dan cuenta de que esa fue la idea que más a mano halló la dirigencia al momento de replantear el futuro de los organismos reguladores de los servicios públicos.
En febrero de 2005, esa alternativa fue propiciada por quien hoy es la segunda autoridad política de la Provincia, Regino Amado. Aquella vez, el presidente Subrogante de la Legislatura, por entonces titular de la comisión de Energía, fue claro en su postura. "Tenemos que tomar medidas, como la unificación en un solo directorio, que defienda a los usuarios y a la empresa, pero no del modo arbitrario en que se viene haciendo, que es muy condescendiente con los empresarios", manifestó.
A cinco años de aquel intento, el ministro Gassenbauer reconoció que la eventual fusión es una de las alternativas que baraja. "No busco cerrarlos, sino jerarquizarlos. Cualquier servicio público tiene prestaciones y funciones comunes. Coinciden en lo económico, en lo legal, en lo administrativo o en la atención al usuario; lo específico es lo técnico, el control de calidad de cada rubro puntual. Esto no quiere decir que se vayan a unir: aún estamos analizando. Pero soy un convencido de que estas cuestiones deben tener una revisión periódica que permita renovar competencias y mejorar la calidad institucional", dijo el funcionario.
Gassenbauer consideró que, por el tiempo transcurrido desde la creación de los entes, se deben tener en cuenta aspectos que van desde las variaciones tecnológicas hasta la regulación de los cuadros tarifarios. "Los ciudadanos exigen y el Gobierno quiere una mayor prestación y calidad en los servicios públicos. Y esto obliga a que los organismos crezcan en competencia y se profesionalicen para ajustarse a los cambios tecnológicos y de servicios", planteó.
Luego, mencionó como prioritario que el usuario tenga mayor participación. "Hoy el usuario tiene un papel más protagónico que hace 15 años. Entonces es bueno que el Estado revise periódicamente a los entes reguladores. Por supuesto, respetando la autarquía, el personal de cada uno y las características de cada organización. La idea es aggionarlos", argumentó.
Sin directorios
La normalización de los entes es una cuenta pendiente de la dirigencia. En efecto, las leyes de creación imponen que la conducción del Ersact y del Epret esté constituida por un directorio propuesto por el Poder Ejecutivo, pero con acuerdo del Poder Legislativo.
Sin embargo, el Epret permanece intervenido desde 2005, luego de un conflicto laboral que alcanzó ribetes escandalosos. El Ersact, en tanto, funciona sin un directorio oficial desde 2001.
Pasaron 15 años del gran movimiento privatizador de los servicios de aguas y cloacas y de luz. Sin embargo, el control eficiente de las empresas prestadoras, ya sean privadas, como EDET; o estatales, como la Sociedad Aguas del Tucumán, sigue siendo uno de los principales reclamos de la ciudadanía. No es casual que cada tanto la clase política reinstale el debate sobre el rol de los entes reguladores.
Esta vez, la discusión es propiciada por el ministro de Desarrollo Productivo, Jorge Gassenbauer. Sin bien el Ersact y el Epret son organismos autárquicos, en la jerarquía del Estado se encuentran bajo la órbita de esa cartera. "Los estoy revisando a los dos; pasaron 15 años desde que se crearon y, a lo largo de este tiempo, cambiaron desde aspectos legales hasta conceptuales que hacen a las prestaciones de los servicios públicos y al control", adelantó a LA GACETA.
"A jerarquizarlos"
Al rediscutir el rol de los entes de control, resulta imposible introducir el debate sobre su eventual unificación. En rigor, los antecedentes más recientes dan cuenta de que esa fue la idea que más a mano halló la dirigencia al momento de replantear el futuro de los organismos reguladores de los servicios públicos.
En febrero de 2005, esa alternativa fue propiciada por quien hoy es la segunda autoridad política de la Provincia, Regino Amado. Aquella vez, el presidente Subrogante de la Legislatura, por entonces titular de la comisión de Energía, fue claro en su postura. "Tenemos que tomar medidas, como la unificación en un solo directorio, que defienda a los usuarios y a la empresa, pero no del modo arbitrario en que se viene haciendo, que es muy condescendiente con los empresarios", manifestó.
A cinco años de aquel intento, el ministro Gassenbauer reconoció que la eventual fusión es una de las alternativas que baraja. "No busco cerrarlos, sino jerarquizarlos. Cualquier servicio público tiene prestaciones y funciones comunes. Coinciden en lo económico, en lo legal, en lo administrativo o en la atención al usuario; lo específico es lo técnico, el control de calidad de cada rubro puntual. Esto no quiere decir que se vayan a unir: aún estamos analizando. Pero soy un convencido de que estas cuestiones deben tener una revisión periódica que permita renovar competencias y mejorar la calidad institucional", dijo el funcionario.
Gassenbauer consideró que, por el tiempo transcurrido desde la creación de los entes, se deben tener en cuenta aspectos que van desde las variaciones tecnológicas hasta la regulación de los cuadros tarifarios. "Los ciudadanos exigen y el Gobierno quiere una mayor prestación y calidad en los servicios públicos. Y esto obliga a que los organismos crezcan en competencia y se profesionalicen para ajustarse a los cambios tecnológicos y de servicios", planteó.
Luego, mencionó como prioritario que el usuario tenga mayor participación. "Hoy el usuario tiene un papel más protagónico que hace 15 años. Entonces es bueno que el Estado revise periódicamente a los entes reguladores. Por supuesto, respetando la autarquía, el personal de cada uno y las características de cada organización. La idea es aggionarlos", argumentó.
Sin directorios
La normalización de los entes es una cuenta pendiente de la dirigencia. En efecto, las leyes de creación imponen que la conducción del Ersact y del Epret esté constituida por un directorio propuesto por el Poder Ejecutivo, pero con acuerdo del Poder Legislativo.
Sin embargo, el Epret permanece intervenido desde 2005, luego de un conflicto laboral que alcanzó ribetes escandalosos. El Ersact, en tanto, funciona sin un directorio oficial desde 2001.
NOTICIAS RELACIONADAS