30 Junio 2010
ENTRAMPADA. Una tortuga marina agoniza en el sarcófago de petróleo. REUTERS
WASHINGTON.- La marea negra provocada por el derrame de crudo de la compañía British Petroleum (BP) ocupa toda la cuenca del Golfo de México y parte está atrapada por la zona inferior de la corriente que toca Cuba y la península de Yucatán, confirmaron científicos tras observar imágenes obtenidas por el satélite Envisat. "Parte de la marea está constantemente atrapada por esta fuerte corriente que empujará las aguas contaminadas a toda la zona meridional del golfo", dijo Bertrand Chapron, del instituto francés de investigación marina Ifremer. Chapron y Fabrice Collard, analista de datos satelitales, estudiaron las nuevas imágenes aportadas por el radar e informaron sobre los resultados en el simposio de especialistas que se realiza en Bergen, Noruega.
La tormenta se agiganta
Entre tanto, en el escenario mismo de la catástrofe, la tormenta tropical "Alex" alcanzaba anoche la categoría de huracán, con vientos sostenidos de 110 km/h. No se prevé que afecte los sistemas de captura del derrame de BP que están en funcionamiento. Pero olas de 4 metros demorarían los planes de acoplar un tercer mecanismo de absorción de crudo, que forma parte del plan de BP para sellar en agosto el pozo averiado. La crisis está en su día 71 sin un final a la vista. Expertos del Gobierno estiman que manan desde el lecho marino hasta 60.000 barriles por día (bpd). El actual sistema de contención de BP captura hasta 28.000 bpd y el programa de BP llevaría el total a 53.000 bpd.
Los costos ecológicos y económicos para el turismo, la vida silvestre, la pesca y otras industrias continúan creciendo para los cuatro Estados afectados de la costa estadounidense. El presidente Barack Obama recibió duras críticas por su manejo de la crisis y los sondeos le confieren bajos registros por su actuación, aunque no tan bajos como los de BP. "El manejo del derrame entrará a la historia como uno de los grandes ejemplos de como empeorar una situación a través de una mala comunicación", dijo Michael Gordon, de la firma Group Gordon Strategic Communications, en referencia a la actitud que tomo BP frente la crisis, como menospreciar el daño potencial al medioambiente, culpar a otros por el desastre y minimizar la estimación de la cantidad de petróleo que estaba fugando al mar. "Fue una combinación de falta de transparencia, falta de un lenguaje sincero y falta de sensibilidad por las víctimas", señaló.
Los residentes costeros también están inquietos por el continuo uso de dispersantes químicos en un intento por disolver el crudo, proceso que insume meses. Lo fracciona en pequeñas partículas que pueden ser digeridas más fácilmente por organismos que viven en el área del Golfo. Pero al mismo tiempo implican riesgo para la salud en el largo plazo. La situación se agravará posiblemente hoy, para cuando se prevé que "Alex" tocará tierra descargando fuertes lluvias y produciendo un oleaje que afectará seriamente la limpieza en las costas. (Reuters-AFP-NA-Especial)
La tormenta se agiganta
Entre tanto, en el escenario mismo de la catástrofe, la tormenta tropical "Alex" alcanzaba anoche la categoría de huracán, con vientos sostenidos de 110 km/h. No se prevé que afecte los sistemas de captura del derrame de BP que están en funcionamiento. Pero olas de 4 metros demorarían los planes de acoplar un tercer mecanismo de absorción de crudo, que forma parte del plan de BP para sellar en agosto el pozo averiado. La crisis está en su día 71 sin un final a la vista. Expertos del Gobierno estiman que manan desde el lecho marino hasta 60.000 barriles por día (bpd). El actual sistema de contención de BP captura hasta 28.000 bpd y el programa de BP llevaría el total a 53.000 bpd.
Los costos ecológicos y económicos para el turismo, la vida silvestre, la pesca y otras industrias continúan creciendo para los cuatro Estados afectados de la costa estadounidense. El presidente Barack Obama recibió duras críticas por su manejo de la crisis y los sondeos le confieren bajos registros por su actuación, aunque no tan bajos como los de BP. "El manejo del derrame entrará a la historia como uno de los grandes ejemplos de como empeorar una situación a través de una mala comunicación", dijo Michael Gordon, de la firma Group Gordon Strategic Communications, en referencia a la actitud que tomo BP frente la crisis, como menospreciar el daño potencial al medioambiente, culpar a otros por el desastre y minimizar la estimación de la cantidad de petróleo que estaba fugando al mar. "Fue una combinación de falta de transparencia, falta de un lenguaje sincero y falta de sensibilidad por las víctimas", señaló.
Los residentes costeros también están inquietos por el continuo uso de dispersantes químicos en un intento por disolver el crudo, proceso que insume meses. Lo fracciona en pequeñas partículas que pueden ser digeridas más fácilmente por organismos que viven en el área del Golfo. Pero al mismo tiempo implican riesgo para la salud en el largo plazo. La situación se agravará posiblemente hoy, para cuando se prevé que "Alex" tocará tierra descargando fuertes lluvias y produciendo un oleaje que afectará seriamente la limpieza en las costas. (Reuters-AFP-NA-Especial)