05 Abril 2010
NO PERDONO. Sebastián Blanco define frente a Daniel Vega, que se equivocó al dar rebote. En la escena aparece el tucumano Leandro Díaz (27).
BUENOS AIRES.- Con muy poco, pero muy poco, Lanús colocó otra carga muy pesada en la espalda de River. El "granate" se impuso por 1 a 0 y hundió al "millonario" en una crisis futbolística que ya no conoce de límites. Es un grande que se hunde como el Titanic y no hay ningún indicio de que levantará cabeza pronto para calmar a sus hinchas.
La nueva derrota, la tercera consecutiva en el Clausura, demostró una vez más que el equipo de Leonardo Astrada está penando por los campos del fútbol argentino. Como si esto no fuera poco, la amenaza del bajo promedio que tendrá en la próxima campaña crece fecha tras fecha. Si el Apertura comenzara hoy River tendría un guarismo de 1,067 y se ubicaría solo arriba de los dos equipos que ascenderán a Primera. Triste, tristísimo para un grande.
Sebastián Blanco marcó el único gol del encuentro a los 41' del primer tiempo. El volante aprovechó de un rebote del arquero Daniel Vega, que pareció haberse contagiado de la mediocridad de sus compañeros.
Antes hubo muy poco fútbol. River, como podía, intentaba llegar al arco de Agustín Marchesín. Por eso nunca lo hizo con claridad, siempre atacó a los "ponchazos". Lanús, en cambio, marcó diferencias sólo con mantener ordenadas todas sus líneas y con toques cortos desestructuró de pies a cabeza al "millo".
En el complemento la historia cambió considerablemente. River salió a buscar con los dientes apretados el triunfo. Astrada esperó 15 minutos y después puso toda la carne en el asador. Con Rogelio Funes Mori, Gustavo Canales y Daniel Villalva intentó revertir la situación. Pero el problema a solucionar no era la carencia ofensiva, sino la gestación. Nunca pudo armar una solo jugada colectiva para llegar al empate.
Lanús, en cambio, de manera inteligente complicó a un rival que le regaló todos los espacios. El "granate" se paró en su campo y jugó de contragolpe.
Santiago Salcedo -un delantero que está con la pólvora mojada-, Blanco, Leandro Díaz y Matías Fritzler desaprovecharon varias situaciones de gol y así evitaron que los "millonarios" sufrieran una derrota por goleada. (Télam-NA-Especial)
Duelo de tucumanos
Estuvo cerca
Leandro Díaz contó con varias chances para llegar al gol, pero todas fueron desaprovechadas. El juvenil integrante del seleccionado Sub 20 dejó en claro que le falta rodaje en el fútbol de Primera división.
Poco y nada
Roberto Pereyra se contagió de la mediocridad generalizada de todo el equipo. El futbolista nacido en Las Talitas realizó sólo una buena jugada en el primer tiempo. En el complemento fue reemplazado.
La nueva derrota, la tercera consecutiva en el Clausura, demostró una vez más que el equipo de Leonardo Astrada está penando por los campos del fútbol argentino. Como si esto no fuera poco, la amenaza del bajo promedio que tendrá en la próxima campaña crece fecha tras fecha. Si el Apertura comenzara hoy River tendría un guarismo de 1,067 y se ubicaría solo arriba de los dos equipos que ascenderán a Primera. Triste, tristísimo para un grande.
Sebastián Blanco marcó el único gol del encuentro a los 41' del primer tiempo. El volante aprovechó de un rebote del arquero Daniel Vega, que pareció haberse contagiado de la mediocridad de sus compañeros.
Antes hubo muy poco fútbol. River, como podía, intentaba llegar al arco de Agustín Marchesín. Por eso nunca lo hizo con claridad, siempre atacó a los "ponchazos". Lanús, en cambio, marcó diferencias sólo con mantener ordenadas todas sus líneas y con toques cortos desestructuró de pies a cabeza al "millo".
En el complemento la historia cambió considerablemente. River salió a buscar con los dientes apretados el triunfo. Astrada esperó 15 minutos y después puso toda la carne en el asador. Con Rogelio Funes Mori, Gustavo Canales y Daniel Villalva intentó revertir la situación. Pero el problema a solucionar no era la carencia ofensiva, sino la gestación. Nunca pudo armar una solo jugada colectiva para llegar al empate.
Lanús, en cambio, de manera inteligente complicó a un rival que le regaló todos los espacios. El "granate" se paró en su campo y jugó de contragolpe.
Santiago Salcedo -un delantero que está con la pólvora mojada-, Blanco, Leandro Díaz y Matías Fritzler desaprovecharon varias situaciones de gol y así evitaron que los "millonarios" sufrieran una derrota por goleada. (Télam-NA-Especial)
Duelo de tucumanos
Estuvo cerca
Leandro Díaz contó con varias chances para llegar al gol, pero todas fueron desaprovechadas. El juvenil integrante del seleccionado Sub 20 dejó en claro que le falta rodaje en el fútbol de Primera división.
Poco y nada
Roberto Pereyra se contagió de la mediocridad generalizada de todo el equipo. El futbolista nacido en Las Talitas realizó sólo una buena jugada en el primer tiempo. En el complemento fue reemplazado.
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