25 Febrero 2010
CONTRA EL RACISMO. Morgan Freeman aspira al Oscar a mejor actor por su caracterización del ex presidente sudafricano Nelson Mandela.
"Invictus" cuenta la verdadera y ejemplar historia de cómo Nelson Mandela (Morgan Freeman) se alió con el capitán del equipo de rugby de Sudáfrica, Francois Pienaar (Matt Damon), para ayudar a unificar su país.
El recién elegido presidente Mandela sabe que, tras el sanguinario apartheid, su país sigue dividido racial y económicamente. Seguro de que puede reconciliar a su pueblo mediante el lenguaje universal del deporte, Mandela le brinda todo su apoyo y encolumna a los sudafricanos detrás del seleccionado de rugby, que contra todos los pronósticos conquistó la Copa del Mundo de 1995.
La película dirigida por Clint Eastwood está basada en el libro de John Carlin "El factor humano: Nelson Mandela y el partido que cambió a una nacion". Está ambientada después de que Mandela salió de la cárcel de Robben Island, donde aprendió los secretos del rugby, y se convirtió en presidente de Sudáfrica.
Freeman, candidato al Oscar al mejor actor por su papel, contó en una entrevista publicada por el sitio español www.adn.es que para componer al personaje, además de leer el libro y el guión, buscó la forma de conocer a Mandela en profundidad.
"Ayuda tener acceso a la persona. Sólo lo he hecho dos veces y en ambos casos he podido conocerlo. Es clave pasar tiempo con ellos, tomarles de la mano para que te transmitan su energía. Fijarte en pequeños detalles, en su manera de ser", explicó.
Orgullo y segregación
También señaló que se enorgullece de haber sido mencionado por el mismo Mandela cuando le preguntaron a quién quería como intérprete de su personaje. "No es que me muriera por hacerlo pero sí, y con el guión correcto, me sentía capaz", confesó.
Respecto de los valores que rescata del ex presidente sudafricano, resaltó la generosidad y la compasión. "Son rasgos que hacen que no puedas evitar admirar a una persona. Al mundo le hace falta tolerancia", enfatizó, al tiempo que señaló haber padecido la xenofobia. "Por supuesto que he sufrido el racismo, nací en Mississippi. Lo experimenté en mi infancia, hasta que conocí más el mundo, pero no en mi carrera", acotó.
"Invictus" competirá el 7 de marzo sólo por dos Oscar: el de mejor actor y el de actor de reparto, al que aspira Damon. "Afortunadamente la película ha tenido muy buenas críticas pero no creo que vayamos a ganar el Oscar con ella. Todos los indicadores que existen van en otros caminos que no son 'Invictus'", anticipó.
El recién elegido presidente Mandela sabe que, tras el sanguinario apartheid, su país sigue dividido racial y económicamente. Seguro de que puede reconciliar a su pueblo mediante el lenguaje universal del deporte, Mandela le brinda todo su apoyo y encolumna a los sudafricanos detrás del seleccionado de rugby, que contra todos los pronósticos conquistó la Copa del Mundo de 1995.
La película dirigida por Clint Eastwood está basada en el libro de John Carlin "El factor humano: Nelson Mandela y el partido que cambió a una nacion". Está ambientada después de que Mandela salió de la cárcel de Robben Island, donde aprendió los secretos del rugby, y se convirtió en presidente de Sudáfrica.
Freeman, candidato al Oscar al mejor actor por su papel, contó en una entrevista publicada por el sitio español www.adn.es que para componer al personaje, además de leer el libro y el guión, buscó la forma de conocer a Mandela en profundidad.
"Ayuda tener acceso a la persona. Sólo lo he hecho dos veces y en ambos casos he podido conocerlo. Es clave pasar tiempo con ellos, tomarles de la mano para que te transmitan su energía. Fijarte en pequeños detalles, en su manera de ser", explicó.
Orgullo y segregación
También señaló que se enorgullece de haber sido mencionado por el mismo Mandela cuando le preguntaron a quién quería como intérprete de su personaje. "No es que me muriera por hacerlo pero sí, y con el guión correcto, me sentía capaz", confesó.
Respecto de los valores que rescata del ex presidente sudafricano, resaltó la generosidad y la compasión. "Son rasgos que hacen que no puedas evitar admirar a una persona. Al mundo le hace falta tolerancia", enfatizó, al tiempo que señaló haber padecido la xenofobia. "Por supuesto que he sufrido el racismo, nací en Mississippi. Lo experimenté en mi infancia, hasta que conocí más el mundo, pero no en mi carrera", acotó.
"Invictus" competirá el 7 de marzo sólo por dos Oscar: el de mejor actor y el de actor de reparto, al que aspira Damon. "Afortunadamente la película ha tenido muy buenas críticas pero no creo que vayamos a ganar el Oscar con ella. Todos los indicadores que existen van en otros caminos que no son 'Invictus'", anticipó.
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