El "santo" necesita que alguien se haga cargo de la creación

El equipo sigue sin aparecer. Sumó su segunda victoria en el campeonato, pero está lejos de consolidar un funcionamiento sólido. Una vez más, Francisco Ferraro apostó por el 4-4-2, el sistema que utilizó desde que arrancó el certamen, pero la imagen volvió a ser la de un conjunto endeble.
El "santo" plantó una doble línea de cuatro, donde los laterales pasaron muy poco al ataque (en el primer tiempo hubo una sola subida de Oreja que casi termina en gol de Alvarez) y los volantes estuvieron contenidos e imprecisos, por lo que Herrera y "Yayo" quedaron aislados y tuvieron que retroceder mucho para buscar la pelota.
Cuando la hinchada comenzó a impacientarse, porque el fútbol no aparecía, el DT mandó a la cancha al "Ratón" Ibáñez en reemplazo de García y cambió el dibujo táctico por un 4-3-1-2. El resultado fue claro: el "santo" fue más punzante. Herrera retrocedió unos metros y se hizo cargo de la creación, Serrano quedó solo en la zona central de la mitad de la cancha y Andrizzi pasó a ser el volante por izquierdo. Alvarez ya no tuvo que bajar tanto e Ibáñez desequilibró en un par de ocasiones con sus gambetas endiabladas por las puntas. Ahí apareció la mejor versión de los albirrojos. ¿Habrá llegado la hora de jugar con un enganche? Ferraro tiene la respuesta.

Alvarez se reconcilió con la red y su aporte fue decisivo

"Yayo" se puso el traje de héroe y fue el salvador de los "santos". Héctor Alvarez (9) se dio el gusto de festejar por primera vez con la camiseta albirroja y resultó clave para la victoria sobre los rosarinos. En el primer gol de San Martín, el santafesino recibió el centro y puso un pase perfecto para que anote Nicolás Herrera. Después fusiló a Cárdenas en el segundo tanto y con un perfecto cabezazo aseguró el triunfo al marcar el 3 a 2. El riojano Herrera (6) también cumplió al anotarse en la red y al encabezar la mayoría de los ataques. Además se asoció muy bien con Gustavo Ibáñez (6), que ingresó en el complemento y complicó con su velocidad.
En el arco, Marcos Gutiérrez (4) se mostró inseguro y hasta cometió un penal antes de retirarse lesionado. Su reemplazante, Sebastián Cuerdo (6), respondió muy bien cada vez que fue exigido y no tuvo ninguna responsabilidad en el segundo gol de los rosarinos.
En defensa, San Martín se cansó de cometer errores. Diego Martínez (4) y Walter Gómez (4) se equivocaron mucho y fueron los responsables directos en las conquistas de Tiro. Marcelo Berza (5) y Facundo Oreja (5)  tuvieron altos y bajos. En la mitad de la cancha, Martín García (4) no aportó marca ni juego, mientras que Fabio Pieters (5), Jorge Serrano (5) y Martín Andrizzi (5) fueron intermitentes, aunque aportaron su granito de arena para salvarse del aplazo.