13 Septiembre 2009
Atlético fue sólido en todas sus líneas y en cada uno de los sectores contó con figuras que descollaron. Javier Páez (9) fue una muralla en el fondo, Diego Erroz (9) marcó y distribuyó la pelota con criterio desde la mitad de la cancha y Juan Pablo Pereyra (9) marcó un golazo, participó en la jugada del segundo tanto y estuvo en casi todos los ataques albicelestes. "Satanás", el cordobés y "El Flaco" conformaron el triunvirato del éxito para los "decanos".
Pero no fueron los únicos que se lucieron. En el equipo de Héctor Rivoira no hubo rendimientos bajos. Lucas Ischuk (7) respondió con seguridad cada vez que Boca lo exigió y se lució al contener un tiro libre de Riquelme.
Matías Villavicencio (8) y Deivis Barone (8) fueron impasables y controlaron tanto por arriba como por abajo a dos delanteros temibles como Martín Palermo y Lucas Viatri.
En la mitad de la cancha, Sebastián Longo (8) y César Montiglio (6) complicaron con sus subidas por los laterales, aunque con el ingreso de Federico Insúa el volante de Yerba Buena estuvo más contenido en el segundo tiempo. Damián Musto (7) presionó constantemente a Riquelme y nunca lo dejó jugar con libertad. Claudio Sarría (6) apareció a cuentagotas, pero cada vez que lo hizo mostró su precisión para dejar a sus compañeros en posición de gol.
En el ataque, Luis Rodríguez (7) complicó con su velocidad a los defensores "xeneizes" y estuvo cerca de festejar. Fabio Escobar (7) ingresó cuando faltaban 26 minutos y tuvo su revancha al marcar el gol que selló el resultado.
Pero no fueron los únicos que se lucieron. En el equipo de Héctor Rivoira no hubo rendimientos bajos. Lucas Ischuk (7) respondió con seguridad cada vez que Boca lo exigió y se lució al contener un tiro libre de Riquelme.
Matías Villavicencio (8) y Deivis Barone (8) fueron impasables y controlaron tanto por arriba como por abajo a dos delanteros temibles como Martín Palermo y Lucas Viatri.
En la mitad de la cancha, Sebastián Longo (8) y César Montiglio (6) complicaron con sus subidas por los laterales, aunque con el ingreso de Federico Insúa el volante de Yerba Buena estuvo más contenido en el segundo tiempo. Damián Musto (7) presionó constantemente a Riquelme y nunca lo dejó jugar con libertad. Claudio Sarría (6) apareció a cuentagotas, pero cada vez que lo hizo mostró su precisión para dejar a sus compañeros en posición de gol.
En el ataque, Luis Rodríguez (7) complicó con su velocidad a los defensores "xeneizes" y estuvo cerca de festejar. Fabio Escobar (7) ingresó cuando faltaban 26 minutos y tuvo su revancha al marcar el gol que selló el resultado.
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