La leptospirosis, una enfermedad que transmiten las ratas, está, literalmente, a las puertas de la ciudad capital de Entre Ríos: en la Peatonal San Martín, donde jaurías de perros vagabundos han hecho su hábitat permanente, un análisis veterinario dio positivo en al menos cuatro canes, aunque otro relevamiento, hecho sobre 80 animales con dueños, pero que habitualmente salen a la calle, arrojó la presencia de la leptospira en unos 70 de ellos.
En el norte de la provincia, al límite con Corrientes, no se ha disipado totalmente el temor frente a la aparición de focos de leishmaniasis, una enfermedad gravísima que otro insecto, del tamaño del jején, y llamado flebótomo, transmite al perro y de éste llega al hombre. No hay denuncia todavía, pero tampoco análisis exhaustivos que permitan descartar su presencia, pues certificar que hay o no leishmaniasis en Entre Ríos, se requiere cumplir un delicadísimo protocolo: una punción en la médula ósea del perro, y luego un análisis con equipos que sólo tiene la Nación.