Condenan a 15 años de cárcel al "gardelito"
Lucas González fue sindicado como autor del crimen de su novia, pero la Justicia decidió cambiar la calificación original de la imputación. Los jueces le dieron la razón a la fiscal de Cámara. El querellante había pedido reclusión perpetua. "Ellos se amaban", dijeron testigos.
Levantó el pulgar derecho y el gesto, acompañado por una leve sonrisa, dejó en claro su pensamiento. El estaba conforme. Cuando muchos pensaban que sería condenado a prisión perpetua, Lucas Jesús González recibió una pena mucho menor: 15 años de cárcel por haber matado a su ex novia María Fernanda Chaila.
González, un miembro del clan "Gardelitos" que aún debe afrontar otros dos procesos judiciales, llegó a juicio imputado de homicio calificado. Según la investigación de la fiscala Teresita Marnero, había matado de un tiro a Chaila luego de haber ido a buscarla a su lugar de trabajo, en el Predio Ferial Norte de El Bajo. Marnero afirmó que la víctima estaba totalmente indefensa y por eso consideró que se trataba de un homicidio agravado por la alevosía. Pero durante la audiencia, esa versión se desvirtuó. Según la fiscala de Cámara, Marta Jerez de Rivadeneira, se trató de un homicidio simple, por lo que pidió 15 años de prisión para González.
Los alegatos se iniciaron a las 17.25 y terminaron a las 18.40. Durante todo el tiempo, separados por apenas seis metros, González y Mary Ahumada, la madre de Chaila, cruzaron miradas. La mujer, en muchos pasajes, se tapó los ojos con las manos, y lloró. "Si su propósito era matarla, no eligió ni el lugar ni la hora adecuada", indicó Jerez para justificar su pedido de pena. No lo consideró así el querellante Alejandro Diéguez, quien no dudó de que el homicidio había sido premeditado y de que González se aprovechó de la indefensión de Chaila, por lo que pidió que fuera condenado a reclusión perpetua.
Los defensores en cambio hicieron hincapié en era ilógico pensar que González quisiera matarla, cuando en realidad lo que pretendía era irse a vivir con ella. Tanto Roberto Flores como Horacio Guerineau dijeron que fue un accidente, aunque el segundo de ellos se encargó más que nada de criticar la información que dio la prensa acerca del caso.
Luego González utilizó 20 segundos para decir: "sé el dolor de la madre, le pido perdón y disculpas, en ningún momento quise matarla; yo sé lo que está sufriendo, al igual que mi madre que me tiene a mí privado de la libertad".
Después fue el momento de esperar. A pesar de las diferencias, durante poco más de una hora familiares de la joven y del acusado se cruzaron en el hall de entrada a la sala de juicio. La tensión se palpaba aunque, según ellos mismos confirmaron, para los "Gardelitos" ya era un triunfo que se hubiera evitado la imputación de homicidio agravado. "Ellos se amaban", dijo Mercedes Soria. Cuando los jueces Ana Lía Castillo de Ayusa, Marta Cavalloti y Pedro Roldán Vázquez regresaron luego de la deliberación, el público se apiñó en la sala. Todos contuvieron la respiración cuando el secretario de la sala, Héctor Rosales, leyó la sentencia. Y cuando llegó al punto que todos estaban esperando, Ahumada y González hicieron el mismo gesto: miraron el piso y cerraron los ojos, estirando una mano y apretando la de sus respectivos abogados. Ellos mismos confesaron después a sus allegados que en ese momento se les apareció la misma imagen: el rostro de María Fernanda.
Coincidencia
La fiscala Marta Jerez de Rivadeneira solicitó que Lucas González fuera condenado a 15 años de prisión por homicidio simple, al entender que no estaba configurada la alevosía que se le endilgó en la investigación preliminar. La fiscala señaló que no había atenuantes, pero tampoco agravantes. El tribunal así lo entendió.
Pidió la máxima
El abogado de la familia de la víctima, Alejandro Diéguez, sostuvo la imputación por la que llegó acusado a juicio Lucas González: homicidio agravado por alevosía. En consecuencia, pidió que fuera condenado a reclusión perpetua. El letrado dijo que González actuó sobre seguro y sin riesgo al asesinar a Chaila.
Por la mínima
El codefensor Roberto Flores solicitó que la sentencia fuera la mínima del homicidio culposo (entre uno y seis años). El codefensor Horacio Guerineau pidió la pena mínima por homicidio preterintencional (sin intención) o culposo (por accidente). De lo contrario, dijo que debería imponerse una pena de no más de 10 años por homicidio simple.
La conducción
A pesar de lo que la Policía creía, no se produjeron incidentes en las jornadas. Las partes, además, coincidieron en destacar la conducción de la presidenta del Tribunal, Ana Lía Castillo de Ayusa, que evitó que se produzcan encontronazos entre los abogados y explicó cada uno de los pasos al público y a los testigos.