29 Marzo 2009
Rolando Mesurado, el joven de 24 años que interceptó y golpeó el jueves a un menor que le había arrebatado su celular, afirmó que reaccionó de esa manera porque necesitaba recuperar su aparato. "Siento que hice lo correcto, porque al teléfono lo utilizo para trabajar y estudiar. Le pegué porque él me lo había quitado", dijo el muchacho en diálogo con LA GACETA. Horas después del hurto, la Justicia ordenó que el menor de 16 años sea entregado a sus padres. "No me gusta la violencia, pero reaccioné así porque me habían quitado algo que era mío. Pero cuando vi que otros también le pegaban, me interpuse", dijo el muchacho que sufrió el robo. Según estadísticas de la Policía, el 70% de los arrebatos son perpetrados por adolescentes de entre 12 y 17 años.
En ese sentido, la camarista María del Pilar Prieto, y docente de la Facultad de Derecho de la UNT, aseveró: "es deber de todos la seguridad de un país y es tarea de expertos el resolverla".
En ese sentido, la camarista María del Pilar Prieto, y docente de la Facultad de Derecho de la UNT, aseveró: "es deber de todos la seguridad de un país y es tarea de expertos el resolverla".
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