BUENOS AIRES.- El diputado nacional del Partido Justicialista (PJ) disidente, Felipe Solá, cuestionó la intención del Gobierno nacional de adelantar las elecciones parlamentarias, y remarcó que “la actitud del Poder Ejecutivo es algo que implica la palabra trampa”.
A la vez, el ex mandatario bonaerense afirmó que “el oficialismo trampea a los ciudadanos que no están politizados y no saben de qué se trata esto (el anticipo de las elecciones legislativas nacionales)”.
En su discurso que dio ayer en el recinto, Solá se quejó porque “la oposición no tendrá tiempo para formar consensos ni para armar sus listas a través de internas”.
“Teníamos la intención de discutir el proyecto de implementación de la boleta única para las elecciones, pero no vamos a poder discutir sobre este tema ni sobre el mejoramiento de las elecciones; queda la impresión de que eso tampoco importa, que es debatir respecto de una reforma política”, sostuvo Solá.
En tanto, el peronista disidente aclaró: “los gobiernos provinciales han puesto una fecha (para sus comicios) sin adelantar nada”, al tiempo que afirmó: “es falso que el clima preelectoral altere la calma (en la sociedad) y el diálogo (entre los partidos políticos)”.
Retomando sus críticas al Gobierno, el ex mandatario kirchnerista consideró que “la modificación del calendario electoral pone más en evidencia la crisis”.
Solá sostuvo también que en un país normal se vota cuando dice la ley, “y no a gusto y piacere de quienes mandan”. “Yo voy a votar en contra y cada uno votará con su conciencia”, anticipó días antes de la sesión de ayer. “Creo que no se puede usar una institución como es el Código Electoral a gusto y piacere de quien manda, buscando adecuar la ley según como esté el clima o el medio ambiente y cambiar de un día para otro las fechas”, agregó el bonaerense.
Insistió en su defensa de los partidos políticos, al señalar: “(el cambio de la Ley Electoral) deja a los partidos sin posibilidad de interna. El Gobierno nacional tiene muchas más facilidades para armarse”. “Es una forma dictatorial de decir ustedes votan cuando yo quiero y no cuando la ley dice. En un país normal se vota cuando dice la ley”, señaló. (NA-DyN-Especial)
Ariel Basteiro (Encuentro Popular y Social) dijo que el proyecto es coherente y de sentido común.
Adrián Pérez (CC) opinó que adelantar los comicios generará problemas para actualizar el padrón electoral.
Miguel Bonasso (Diálogo por Buenos Aires) sostuvo: “el proyecto protege al Estado y promueve la paz social”.
Jorge Sarghini: “si quieren legitimarse, corrijan las medidas en lugar de pensar en adelantar
las elecciones”.
Claudio Lozano (Proyecto Sur) opinó que la propuesta
es un verdadero mamarracho institucional.
Pedro Azcoiti (UCR) dijo que su partido no cree que la reacción ante la crisis sea modificar la agenda electoral.