BUENOS AIRES.- La polémica en torno del avance en la Justicia de las causas por violaciones a los derechos humanos sumó un nuevo capítulo. La jueza de la Corte Suprema de Justicia Carmen Argibay respondió con dureza los reiterados pedidos de la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, de que se les imprima mayor celeridad a esas investigaciones.
“Le diría a la señora presidenta que no es cierto que los poderes Legislativo y Ejecutivo han hecho todo y ahora es la hora de la Justicia”, arremetió Argibay durante una charla de la que participó en la provincia de Mendoza, según consignó el matutino “La Nación”.
A la fuerte réplica, le sumó un pedido de más fondos para agilizar el trámite de los expedientes y mejorar el trabajo de la Justicia en general. “El (Poder) Legislativo y el (Poder) Ejecutivo nos han recortado el Presupuesto”, se quejó.
Además, cuestionó la demora en el nombramiento de jueces, un proceso en el que interviene el Congreso y, en última instancia, el Poder Ejecutivo. “Si quieren que aceleremos los juicios, primero nombren los jueces que no tenemos”, se quejó la jueza.
El embate de Argibay fue más allá. “Ellos creen que con haber puesto por delante la intención de hacer los juicios y derogar las leyes de Obediencia Debida y Punto Final ya estaban hechos. No es cierto. Todavía falta mucho y hay que hacer muchas cosas. Las investigaciones no son fáciles y ha pasado mucho tiempo”, planteó en obvia alusión a los Kirchner.
No obstante, la jueza admitió -según el matutino porteño- que los problemas en el funcionamiento de la Justicia no son exclusivamente adjudicables a la falta de presupuesto. “No es sólo una cuestión de dinero. Reconozco que hay culpa de muchos jueces. Aquí ninguno es un santo, ninguno está libre de culpa ni puede tirar la primera piedra”, señaló. (Especial)