05 Enero 2009
LLENAS. La gente copó las jugueterías. LA GACETA/JOSE INESTA
A sólo horas de la llegada de los reyes magos, los tucumanos se lanzaron a las calles, a las galerías y a los shoppings para comprar los regalos. El equipo multimedia de LA GACETA.com salió al microcentro y, en medio de los paquetes, recogió testimonios:
El origen de la celebración
"Nacido Jesús en Belén de Judá en tiempos del rey Herodes, unos Magos llegaron de Oriente a Jerusalén preguntando: ¿Dónde está el Rey de los Judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle."
Estas son las palabras del evangelio de San Mateo, único apóstol que nombra a los "magos". En la antigüedad se llamaba así a los sabios que se ocupaban de ciertas ciencias como la astrología y la astronomía.
Si bien es un misterio el número exacto de cuántos magos fueron los que llegaron al nacimiento del Mesías, a partir del texto bíblico se dice que fueron tres en representación de los obsequios que traían: oro, incienso y mirra.
De acuerdo con evangelio, la noche de Navidad ellos visitaron al rey Herodes para anunciarle el acontecimiento. Pero el monarca veía en Jesús un terrible rival y decidió aniquilarlo. Por eso, les pidió que volvieran y le contaran dónde estaba el niño. Advertidos por un ángel, del propósito de Herodes, tras adorar a Jesús en Belén, regresaron a su país por otro camino.
Los nombres, Melchor, Gaspar y Baltasar, nunca fueron nombrados en la Biblia. Provienen de la iglesia de San Apolinar Nuovo en Ravena, Italia. Uno de los temas de polémica es el origen de los Reyes. La teoría más firme, afirma que eran persas, a partir de su forma de vestir.
Los restos de los Reyes Magos están guardados desde 1.164 en una urna de oro y plata que pesa 350 kilos en la Catedral de Colonia, Alemania. Hoy, la imaginación popular alteró la leyenda.
El origen de la celebración
"Nacido Jesús en Belén de Judá en tiempos del rey Herodes, unos Magos llegaron de Oriente a Jerusalén preguntando: ¿Dónde está el Rey de los Judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle."
Estas son las palabras del evangelio de San Mateo, único apóstol que nombra a los "magos". En la antigüedad se llamaba así a los sabios que se ocupaban de ciertas ciencias como la astrología y la astronomía.
Si bien es un misterio el número exacto de cuántos magos fueron los que llegaron al nacimiento del Mesías, a partir del texto bíblico se dice que fueron tres en representación de los obsequios que traían: oro, incienso y mirra.
De acuerdo con evangelio, la noche de Navidad ellos visitaron al rey Herodes para anunciarle el acontecimiento. Pero el monarca veía en Jesús un terrible rival y decidió aniquilarlo. Por eso, les pidió que volvieran y le contaran dónde estaba el niño. Advertidos por un ángel, del propósito de Herodes, tras adorar a Jesús en Belén, regresaron a su país por otro camino.
Los nombres, Melchor, Gaspar y Baltasar, nunca fueron nombrados en la Biblia. Provienen de la iglesia de San Apolinar Nuovo en Ravena, Italia. Uno de los temas de polémica es el origen de los Reyes. La teoría más firme, afirma que eran persas, a partir de su forma de vestir.
Los restos de los Reyes Magos están guardados desde 1.164 en una urna de oro y plata que pesa 350 kilos en la Catedral de Colonia, Alemania. Hoy, la imaginación popular alteró la leyenda.
La rosca de reyes, otra tradición
La rosca también es una de las costumbres en la celebración Epifanía. Su sentido es compartir el pan en familia. El pan circular, es dulce y simboliza en eterno renacer de la vida.
Su origen data de una época anterior al cristianismo. En Francia, la rosca era comida en las fiestas Saturnales en las que se elegía el rey. En España y Portugal, se prepara el roscón de Reyes.
La tradición fue adoptada por los países americanos. Aquí se regalan roscas simples que son rellenas, entre otros, con crema pastelera o fruta seca. LA GACETA ©
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