29 Diciembre 2008
ACOMPAÑANTE. El príncipe Guillermo estaba con su tío durante la expedición de caza. REUTERS
LONDRES, Inglaterra.- Cazaba cuando lo cazaron. El flash fue contundente y lo mostró al mundo con un gesto que despertó polémica. El príncipe Eduardo de Inglaterra, el hijo menor de la reina Isabel II, fue duramente criticado por unas fotos en las que, aparentemente, está golpeando a un perro.
En las imágenes, publicadas por varios medios británicos, el conde de Wessex aparece con ropa de caza, con una escopeta bajo un brazo y, en el otro, una vara con la que amenaza a uno de los dos canes que lo rodean. Al parecer, los animales se peleaban por un faisán muerto durante la expedición, en una finca donde la familia Real pasa generalmente la Navidad.
Varias asociaciones defensoras de animales reaccionaron ante las publicaciones. "Eduardo ha dado un ejemplo horrible", condenó un vocero de la Liga contra los Deportes Crueles. "Es un delito causar sufrimiento a un animal de forma innecesaria. Golpear a un perro es un acto patético, cobarde y despiadado", agregó otro del grupo Ayuda Animal, en declaraciones reproducidas por el diario porteño "Clarín".
Desde el Palacio de Buckingham, indicaron que "no se estableció que el príncipe agrediera al can, aunque las fotos lo enseñan agitando una vara". La prensa agregó que también participaron de la partida el príncipe Felipe, marido de Isabel II; el príncipe Andrés, su segundo hijo, y el príncipe Guillermo, hijo de Carlos, heredero al trono. (Especial)
En las imágenes, publicadas por varios medios británicos, el conde de Wessex aparece con ropa de caza, con una escopeta bajo un brazo y, en el otro, una vara con la que amenaza a uno de los dos canes que lo rodean. Al parecer, los animales se peleaban por un faisán muerto durante la expedición, en una finca donde la familia Real pasa generalmente la Navidad.
Varias asociaciones defensoras de animales reaccionaron ante las publicaciones. "Eduardo ha dado un ejemplo horrible", condenó un vocero de la Liga contra los Deportes Crueles. "Es un delito causar sufrimiento a un animal de forma innecesaria. Golpear a un perro es un acto patético, cobarde y despiadado", agregó otro del grupo Ayuda Animal, en declaraciones reproducidas por el diario porteño "Clarín".
Desde el Palacio de Buckingham, indicaron que "no se estableció que el príncipe agrediera al can, aunque las fotos lo enseñan agitando una vara". La prensa agregó que también participaron de la partida el príncipe Felipe, marido de Isabel II; el príncipe Andrés, su segundo hijo, y el príncipe Guillermo, hijo de Carlos, heredero al trono. (Especial)